Durante estos años de luchas internas, el cine es un arma primordial en el combate. Múltiples realizadores europeos y estadounidenses generan decenas de reportajes para sus públicos. De la misma forma, las cadenas de televisión de todo el mundo se instalan en forma persistente en San Salvador y cubren todos los días los hechos.
Corta es la vida de esta casa colonial restaurada y también inaugurada en el año 2008. En plena Plaza Central fue edificada en 1853 sobre el lugar que se encontraba la primera iglesia de la región , la que fue destruida en el siglo XVII. Si bien no es la región más económica del pueblo debido a su ubicación y vistas privilegiadas de la Iglesia de Santa Lucía. En un día completo se puede ver perfectamente la localidad y hacer alguna de las excursiones que hay en los aledaños.
Periodistas y camarógrafos de países amigos se unen a los de El Salvador en su afán de registrar los acontecimientos. Entre ellos están Hernán Vera, Richard Izarra, Yderín Tovar y Carlos Henríquez Cosalvi, todos ellos de venezuela. Henríquez, mejor conocido como “Santiago”, su nombre en la clandestinidad, es la célebre voz de Radio Venceremos. Carlos Henríquez Consalvi “Santiago” crea a mediados de la década de 1990 el Museo de la Palabra y de la Imagen , una idea ciudadana, establecida legalmente como una fundación sin ánimo de lucrar, la cual se ocupa de investigar, rescatar, proteger y difundir elementos de la civilización y la crónica de El Salvador. Tiene colecciones de manuscritos, fotografía, audio, cine, vídeo, afiches, elementos y publicaciones. El MUPI tiene un local en la capital, pero también realiza exposiciones itinerantes sobre temas de identidad, cultura y memoria histórica en los lugares mucho más apartados del país.
La motivación fundamental del proyecto es ofrecer la visión propia de la insurgencia, sobre lo que pasa en el país. La resolución de vencer obedece a la necesidad de mostrarle al planeta que no es alguna la publicidad de la administración Reagan sobre la derrota de la insurgencia. El primer largometraje que se firma con dicho nombre es Carta de Morazán , que es además de esto el primero en hacer la hibridación entre cine y video y entre los trabajos mucho más premiados del cine revolucionario.
Don Rubén Fue El Maestro De Los Publicistas Salvadoreños
El largometraje es una visión personal de la relación entre el hombre y la tierra, en el que el director se pregunta sobre quién es dueño de quién, la tierra del hombre o al revés. La película se muestra con enorme éxito en el Festival de Berlín, sin embargo sus compatriotas no la aprecian en el momento en que se exhibe. Esto enseña que transcurra más de una década hasta su siguiente largometraje, El carretón de los sueños , que realiza por encargo del Instituto de Vivienda Mínima .
El Centro Cinematográfico de El Salvador Revolucionario nace como institución desde la producción concreta de un largometraje, El Salvador, el pueblo vencerá bajo la dirección del puertorriqueño Diego de la Texera . El largometraje necesita un respaldo político y estructural y con ese propósito se funda el Centro. Entre los integrantes están los escritores Manlio Argueta, Horacio Castellanos y Miguel Huezo Mixco, quien es el coordinador, así como Tomás Guerra y Roger Hermoso, entre otros. La radio llamada Liberación, marcha en un inicio en Costa Rica y después de la ofensiva de 1981 se monta la Radio Farabundo, en Chalatenango, paralela al funcionamiento de la Radio Venceremos, en Morazán.
Teatro Colón En Bogotá, El Teatro Nacional De Colombia
En el final, casi siempre el material sale del país para ser editado en vídeo de 3/4 de pulgadas y distribuido en distintos formatos. La película da un análisis histórico, un camino desde la temporada de la conquista hasta la situación popular, económica y política de finales de la década de 1970. Primero cuenta 500 años de la historia del El Salvador desde la resistencia indígena, la conquista española, la lucha por la independencia y la unificación de Centroamérica, hasta la insurrección de 1932, que encabeza Farabundo Martí, el internacionalista salvadoreño que riña al lado del nicaragüense César Augusto Sandino. Se forma el Sistema Radio Venceremos al articularse los distintos medios de publicidad, la radio, el cine y el video.
Alejandro, mezcla de ficción y de reportaje, es una larga entrevista a Cotto, tal como fragmentos de sus películas y de la otra de sis facetas, la de productor promocional, que se encuentra dentro de las escasas opciones que tiene para seguir en el trabajo del cine. Tanto estos grabes como los del Sistema de Radio Venceremos procuran salidas alternativas para su difusión pues es imposible que se proyecten en salas comerciales. Sin embargo, el cine de este instante histórico es quizá el que mayor difusión e impacto tiene en el campo internacional, gracias a una red de comités de solidaridad en el exterior que lo distribuyen en festivales, así como a los premios que se consiguen en dichos certámenes. Las películas se muestran en ciudades, salas universitarias, sindicatos y después se llevan a aldeas y lejanas ciudades mediante una red de cine móvil inteligente que tiene un considerable impacto en las poblaciones campesinas. Sin embargo, para muchos de sus protagonistas, el cine de la guerra es un “producto de exportación” que se destina a colectar fondos y simpatías hacia el proceso revolucionario y no deja estructuras, ni capacita a personas que puedan ofrecerle continuidad al cine documental tras el enfrentamiento.
Suchitoto: El Pueblo Mucho Más Bonito De El Salvador
En conclusión, para el cineasta, Rubén Rossell fue un hombre capaz, que sabía lo que hacía, que conocía de publicidad mucho más que nadie y que fue “el maestro de los publicistas salvadoreños”. “Él vino a enseñarle a la gente a realizar publicidad, muchas empresas de ahora son prácticamente creación de Rubén Rossell”, mentó Alejandro Cotto, cineasta y escritor salvadoreño, que trabajó como creativo de Noble & Socios Advertising a partir de 1968. “Yo quisiese que los salvadoreños amaran a su país, amaran a su pedazo de tierra, amasen a su pueblo como yo amo a Suchitoto, pues lo amo intensamente”. Película sobre un periodista estadounidense que, mientras cubre la guerra civil salvadoreña, queda en medio de las guerrillas y las fuerzas militares.
Andando es como mejor vas a comprender el encanto de este rincón y el porqué se aproxima la multitud a visitarlo. Si bien su interior en madera es bastante sutil, el exterior le da encanto motivado por ambiente y la vida de la plaza principal de la región. Como les he dicho más arriba, para gozar de esta localidad lo mejor es hacerlo andando. Además de esto el viaje en autobús es bastante cansado, ya que las distancias son pequeñas pero los tiempos bastante enormes. Conque pienso que no vale la pena hacer una visita “express” a esta localidad.
Además, se producen libros, audiovisuales y numerosas actividades educativas y culturales. Allí es donde están resguardados varios de los negativos y de los videotapes de la cinematografía salvadoreña de la guerra. La iniciativa aparece desde la temporada de Radio Venceremos, cuando exactamente los mismos guerrilleros son siendo conscientes de que toda esa historia política en la que se está hay que documentarla y guardarla. Firmados los acuerdos, comienzan a salvar los materiales y agarrar lo que hay en las áreas de trabajo de Managua, México, Novedosa York. Regresa en 1998 a El Salvador y organiza en el año 2003 el I Certamen Nacional de Video y la Muestra En todo el mundo de Video, en conjunto con el Consejo Nacional para la Cultura y el Arte .
El FMLN efectúa una esencial ofensiva militar en el primer mes del año de 1981, pocos días tras la toma de posesión del presidente estadounidense Ronald Reagan, quien se compromete en lo personal en detener la avanzada del “comunismo” en Centroamérica. La ofensiva fracasa, pero es el comienzo de una década de guerra civil, con niveles de crueldad sin precedentes hasta el momento. Durante una década, con altos y bajos, se presenta una suerte de “empate” entre las fuerzas guerrilleras y el ejército oficial.