Todos los días, la mujer recibía comentarios descalificativos, ofensivos y ultrajantes por haber rehecho su historia con Eric Domb. En una ocasión, dicho hombre, de unos 60 años, padeció una agresión física por la parte de Tomás Gimeno cuando una mañana se dirigía a su vehículo en la zona de Radazul. Este fue un nuevo ejemplo del carácter impulsivo y violento que en varias ocasiones mostraba el padre de Anna y Olivia con quienes creía que perjudicaban sus intereses y deseos, o bien los de sus familiares.
El destino deseó que la pequeñaElsa viniera al planeta un día antes del primer aniversario de la desaparición y asesinato de sus dos hermanas. Exactamente, el 26 de abril del pasado año fue la última vez que Beatriz vio a sus dos hijas con vida. Y la mató a usted, Beatriz, en otro delito premeditado, calculado, concebido para hacerle a usted el mayor daño viable.
Caso Anna Y Olivia
Beatriz Zimmermann, la madre de las niñas desaparecidas en Tenerife hace cuatro semanas, ha indicado este martes, coincidiendo con el Día En todo el mundo de los Pequeños Desaparecidos, que no hay palabras para describir lo que se siente ante la desaparición de un familiar. “Más aún si hablamos de un niño”, abunda Beatriz en una carta, donde añade que “la impotencia, la ilusión y los temores se intercalan en el mismo cuerpo” ante la desaparición de un individuo cercano. Aquella tarde, tras agarrar a las pequeñas y llevarlas a su casa -la autopsia de Olivia descubrió la asfixia mecánica por sofocación como causa de la desaparición- las introdujo en 2 bolsas de deporte y se fue en su coche hasta el puerto de Santa Cruz de Tenerife. Cargó desde el maletero a la barca los petates (fueron las únicas imágenes de él y la Guardia Civil efectuó mediciones de las bolsas para calcular si podían ir las pequeñas dentro, como temieron desde el principio) y empezó a andar. La investigación piensa que se desprende de las bolsas ya antes de efectuar varias llamadas a la madre, donde le aseguró que se iba con las pequeñas, que iban a estar bien cuidadas por él pero que ella no iba a “volver a verlas nunca mucho más”. Luego regresó a puerto, salió a comprar tabaco, cargó su teléfono y regresó al mar.
Beatríz Zimmerman está embarazada de seis meses cuando ha pasado un año del asesinato de sus hijas. Esa tarde, Gimeno había acabado con la vida de sus hijas en su casa de Candelaria para entonces arrojar sus cadáveresal mar, lastrados a diferentes objetos. La tripulación del Ángeles Alvariñotan solo encontróel cuerpo de Olivia. Fue en la gala de distribución de los premios Taburiente, donde agradeció a los tripulantes delbuque Ángeles Alvariñolaimplicación en las labores de búsqueda de sus hijas.
Tanto la mujer como el bebé están en perfecto estado y toda la familia está feliz tras la tragedia vivida. Zimmermann ya estaba casada con Érik, su pareja, en el momento en que sucedieron los hechos hace un año y él ha sido su gran acompañamiento para enfrentar la pérdida de Anna y Olivia. La coincidencia en las datas, visto que su bebé nazca justo un año después del último día que pasó con las niñas, fué interpretada desde su entorno como “un regalo de Anna y Olivia” para ayudarle a recuperar la alegría en estos días tan duros. El pasado 27 abril, las pequeñas Anna y Olivia fueron asesinadas a manos de su padre, Tomás Gimeno, en la isla de Tenerife. Durante semanas, las niñas fueron buscadas en el mar por el buque Angeles Albariño que finalmente halló 47 días tras su desaparición, el cuerpo sin vida de Olivia, la mayor de seis años.
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Había toque de queda por la pandemia esos meses en Canarias y por este motivo fue interceptado por la Guarda Civil pero mencionó que ahora se iba y la cosa no fue a más. Entonces, los investigadores creen que se tiró al agua para suicidarse con alguna sujeción que le impediría salir a flote. Su cadáver no ha sido encontrado y durante un tiempo se especuló con la posibilidad de que estuviese con vida pero ni los investigadores ni, lo más esencial, Beatriz, creen esta posibilidad, lo que ha ayudado al desarrollo de duelo de Zimmermann. La situacion de Anna y Olivia pertence a los mucho más recordados de violencia vicaria por la frialdad y monstruosidad con la que actúo Gimeno para deshacerse de sus hijas. Lo logró para ocasionar a su madre un “mal inhumano”.
Toda España, comenzando por sus Reyes, toda Europa, gran parte del mundo, está conmovida por un hecho frente al que la palabra asesinato es poco expresiva, pero no hay palabras en el diccionario para determinar tanto horror. Y en este momento está usted esperando noticias de Ana, si es que le quedan fuerzas para aguardar. López explicó que para ella piensa “una ilusión, un rayo de promesa tras todo el sufrimiento que ha padecido”. A inicios de septiembre, era nuestra Zimmerman quien enviaba una carta apuntada a la directiva y comunicadora del espacio matinal de Telecinco. En dicha misiva, Beatriz exponía a Ana Rosa no estimar seguir hablando del asesinato de sus hijas por la angustia que le producía. Beatriz pide “que sonrían más, que valoren mucho más la vida y las pequeñas cosas que nos traen la alegría.
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En verdad, el pasado martes dio a luz una niña, tras un embarazo que ha podido llevar a término sin adversidades graves. De este modo lo confirmó ayer Joaquín Amills, presidente de SOS Desaparecidos y amigo de Beatriz y su marido. Amills ejerció como su representante en las seis semanas que mediaron entre la muerte violenta de las inferiores y el descubrimiento del cuerpo de Olivia a una gran hondura en el mar. El caso de las dos pequeñas asesinadas en manos de su padre en Tenerife tuvo en desequilibrio a toda España. Tomás tenía que llevar a cabo distribución de las inferiores a su madre después de que las pequeñas pasaran la tarde con él. La distribución nunca se produjo y Zimmermann denunció la desaparición de los tres frente a las autoridades.
“Ella se agarra a lo positivo y las recuerda en los buenos instantes y le sacan una sonrisa. La llegada de un nuevo bebé en una fecha tan especial le va a hacer rememorar con más cariño si cabe a las hermanas mayores que, como dijo nuestra Beatriz, “nos cuidan desde el cielo”. El diez de junio, el robot del buque Angeles Albariño encontró el cuerpo de Olivia dentro de una bolsa que estaba atada al ancla de la embarcación de Tomás Gimeno. También, se encontró otra bolsa en cuyo interior no había nada si bien todas y cada una de las sospechas apuntaban a que allí podría estar su hermana Anna, de un año de edad. Actualmente, no se conoce nada sobre el paradero de los cuerpos de la pequeña Anna ni de Tomás Gimeno. A esa mujer le dejó una caja clausurada con 6.200 euros y un mensaje para que abriera exactamente la misma cerca de la medianoche.
Esa misma tarde, Gimeno había acabado con la vida de sus hijas en su casa de Candelaria. Tras los primeros días de la desaparición, Beatriz decidió mostrar una actitud de positividad y de promesa en que las inferiores podían encontrarse en otro lugar y reclamó a Gimeno que las entregara y demostrara sus cualidades de padre. Todo esos mensajes fueron articulados por un equipo de personas de su círculo más cercano. Como reflejaron los medios, Zimmermann empleó cartas hacia el progenitor y sus niñas, así como fotografías y vídeos de las inferiores. Ese proceso de comunicación persiguió, y logró en decisión correcta, que la sociedad canaria, de toda España y de diversos países se sensibilizara con la situación que pasaba una madre a la que le habían arrebatado a sus hijas.
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Según se probó en la investigación, Tomás las intoxicó con somniferos para entonces asfixiarlas, meterlas dentro de bolsas de deportes y lanzarlas al mar, lastradas a distintos elementos. La tripulación del Ángeles Alvariño solo encontró uno de los tres cuerpos, específicamente, el de Olivia. En conjunto, desde 2013, 47 inferiores han perdido la vida en España víctimas de la violencia vicaria.
A principios de septiembre, Beatriz enviabauna carta dirigidaa Ana Rosa Quintana, en la que exponía no estimar continuar comentando del asesinato de sus hijas porla angustiaque le producía. A pesar de garantizar que no tenía “la solución para erradicarla crueldad vicaria”, reconocía asimismo haber aprendido “que estas cosas se pueden evitar si desde un principio se es tajante con una ofensa”. La novedad, dada a comprender por Joaquín Amills, presidente de SOS Desaparecidos, a Informativos Telecinco ha cogido a todos por sorpresa, en tanto que en el momento en que se conoció su embarazo, se apuntó a que daría a luz a inicios de verano. Según Amills, el nacimiento de la bebé devolvió la ilusión a la tinerfeña, quien le habría movido que la llegada de Elsa”transforma el dolor en amor y da a la vida significado”. Da la al azar de que Elsa es el nombre de una de las hermanas de la película \’Frozen\’, a quien Beatriz comparó con sus hijas Anna y Olivia.