Lourdes se convirtió en el santuario Mariano mas visitado de Europa y el segundo en el mundo, tras el Santuario de la Virgen de Guadalupe en México. Inmensidad de enfermos fueron sanados en las aguas milagrosas de Lourdes, pero el mayor milagro siguen siendo las muchísimas conversiones del corazón. Otro cáliz que próximamente tomaría fue la desaparición de su padre en 1871, 6 años después que su mamá. Supo de la desaparición de su papá, a quien no había visto mas desde el momento en que dejó Lourdes, pero sabía que había muerto en la fe.
Por última vez fue a la amada gruta donde su despedida fue de todo corazón. Al día después se despidió de su familia y en Julio , Bernardette dejó su pueblo natal para nunca más regresar. La Virgen Muy santa le dio una felicidad especial al llamarla a la vida religiosa.
Primeras Etapas De Su Vida
Su profesora de novicias fue la hermana Marie Therese Vauzou . La Madre Superiora en ese momento le dio el nombre de Marie-Bernarde en honor a su madrina que se llamaba “Bernarde”. A lo largo del otoño de 1855 Bernadette es alcanzada por la epidemia de cólera, que en pocos meses cobró treinta víctimas. La salud de la niña, endeble por las privaciones sufridas en la primera infancia, recibe un nuevo golpe. A lo largo de toda su breve existencia Bernadette va a llevar impresas en su frágil cuerpo las huellas de sus múltiples dolencias, primordialmente el asma. Pero semeja que las patologías, al debilitar el cuerpo de Bernadette, fortalecían al mismo tiempo su espíritu.
En 1964, se presentó la película«Aquella joven de blanco» . Hablamos de una película de españa en blanco y negro dirigida porLeón Klimovsky, fundamentada en el guion de Fernando Galiana y Manuel Tamayo, conCristina Galbóinterpretando el papel de Bernadette Soubirous. La pequeña siempre y en todo momento mantuvo una consistente actitud de tranquilidad durante los interrogatorios, sin mudar su crónica ni su actitud, ni pretender tener un conocimiento más allá de lo que se dijo respecto a la visión descrita. Una serie de dieciochoapariciones marianasque Soubirous aseveró haber tenido en 1858 en Lourdes, y los milagros que las sucedieron, acabaron por proporcionarle popularidad mundial ahora al instante de su muerte. Pronunció sus votos perpetuos el 22 de septiembre de 1878, en un tiempo en que se sentía mejor. Al siguiente 11 de diciembre, regresó a la enfermería, para jamás mucho más salir.
Bernadette Soubirous, Santa (1844-
Su madre, Louise Castérot, era una mujer piadosa y preocupada por sus hijos que ocasionalmente trabajaba de modista. Casa paterna de Bernadette Soubirous enLourdes, también llamada molino Lacadé , donde vivió la familia a partir de1863. En esta casa murió la madre de Bernadette, Louise Castérot, el 8 de diciembre de 1866. Con anterioridad, la familia había vivido en el molino de Boly donde nació Bernadette, y en elcachoto calabozo de la calledes Petits Fossés, de donde salió a buscar leña el día en el cual apuntó haber tenido su primera visión, el 11 de febrero de 1858. La fotografía se encuentra en la Biblioteca Nacional de Francia.
Las críticas de los vecinos de Lourdes estaban divididas. Esos vecinos que creían que Bernadette decía la realidad, aceptaban que la mujer que se le aparecía era la Virgen María. Sin embargo, Bernadette jamás sostuvo en ese tiempo «haber visto a la Virgen» y continuó empleando el término «Aquerò». El 18 de Enero 1862, el obispo firmó la pastoral aprobando las apariciones.
Sus últimos meses fueron muy difíciles, haciéndole pasar durante la noche obscura del alma. Perdió seguridad, la paz del corazón y la seguridad del cielo. Bernardette profesó el 30 de octubre de 1867 con el nombre de Sor María Bernarda. No obstante, la alegría de ese momento fue teñida por una ruda humillación. Se puede realizar una salvedad a la regla y recibir a una joven sin dote, si ella tiene signos claros de vocación”.
Bernadette Soubirous Encuentros Con El Amor (biografía Joven) Tapa Blanda – 30 Junio 2011
El escultorAndré-César Vermarerepresentó a santa Bernadette Soubirous vestida de pastora. Se sucedieron interrogatorios permanentes y también incisivos de parte de diferentes autoridades civiles francesas y autoridades eclesiásticas de la Iglesia católica. Desarrolló abscesos en los oídos, los que la hicieron prácticamente sorda por un tiempo. Si no hubieran sido tan evidentes sus síntomas, nadie se hubiese previsto que estaba enferma. Su actitud tan serena y jubilosa no manifestaba el profundo sufrimiento que padecía. Su nueva posición le daba la posibilidad de pasar bastante tiempo en la capilla, cerca del Muy santo Sacramento.
Inicialmente, los progenitores de Soubirous, singularmente su madre, se sintieron abochornados y trataron de prohibirle que fuera. La supuesta aparición no se identificó hasta la decimoséptima visión. Si bien la multitud del pueblo que creía que ella estaba diciendo la verdad asumió que vio a la Virgen María, Soubirous nunca afirmó que fuera María, usando consistentemente la palabra aquero .
Pero todas y cada una estas vanidades pasaron por ella rápidamente y sin dejar ningún indicio en su corazón. Pasaba como una mas, excepto por sus virtudes, por su inocencia, su candor y integridad en su obrar. Hizo su primera comunión exactamente el mismo año 1858, el 3 de junio, día de Corpus Christi. Nada espectacular sucedió salvo que ella había piadosamente recibido a Jesús.
La frente lisa y serena, los ojos eran azul celeste llenos de amor y los labios daban a conocer suavidad y mansedumbre. La Señora parecía saludarla tiernamente mientras que se inclinaba frente Bernardita. El 11 de febrero, de 1858, era el día escogido para que el cielo se hiciera que se encuentra en la tierra. Ese día cambiaría para siempre, no solo la vida de Bernardita, sino marca el comienzo de una fuente de felicidad que ha brotado para toda la raza humana. Ni la ignorancia, ni la pobreza, ni el aspecto enfermizo de Bernardette le previnieron de apreciar en ella la simplicidad y la piedad.
A partir de ese instante empezó para Bernadette una misión de testimonio que cumplió con lealtad, sinceridad y desinterés. En 1866, poco después de la inauguración de la cripta construida bajo la gruta, abandonó Lourdes. Pronunció sus primeros votos en producto de muerte, el 25 de octubre de 1866; restituida, los renovó en 1867. Primero como novicia y más tarde como enfermera, propagó a su alrededor gran alegría, pese a su precario estado de salud.