/** * */ Biografia De El Lute - Todo biografias

Biografia De El Lute

Eleuterio Sánchez, El Lute , primero bandolero y después escritor y letrado, tiene una vida interesante. A las ocho de la tarde, bajo el título Anda y no revientes (emulando el título de su libro), va a contar de qué manera llegó a ser el ciudadano mucho más perseguido en este país, que proseguía con apasionamiento sus fugas de la prisión. El Lute nació en una chabola de un vecindario periférico de Salamanca en 1942.

El 3 de enero de 2009 “el Lute” volvió a comparecer en múltiples medios con la petición de que se declare “radicalmente nulo” el proceso por el que fue condenado a muerte. Aducía que su juicio había sido un juicio sumarísimo, sin garantías para él como procesado, y a lo largo de la vigencia de una ley franquista. Con todo, el desarrollo de transformación y el quiebro que Eleuterio, a base de tesón, dio a su vida en el momento en que parecía condenado a una espiral de fugas y detenciones es irrefutable.

El Lute, La Odisea De Un Quinqui

En mayo de 1965 esa vorágine dio un paso mucho más y su historia acabó por mudar totalmente en el momento en el que decidió, al lado de 2 compañeros, cometer un atraco en una joyería. Tras el golpe al lugar, y con el botín en la mano, algo pasó, y todo cuanto puede salir mal, salió peor. El vigilante de seguridad salió repentinamente de la tienda en su persecución y, en ese instante, recibió un tiro mortal de entre los tres delincuentes. El Lute, o uno de sus dos acompañantes, mataron a un hombre inocente y dejaron sin vida el alma de sus familiares. El Lute ahí dejó de ser el amable criminal que escapa de la policía para convertirse, a ojos de la sociedad, en un asesino.

Sánchez aprendió a leer y escribir en la cárcel y tras ser puesto en libertad en 1981 publicó su autobiografía, Camina o revienta. Sus fugas eran, además, mucho más complicadas por el hecho de que todo el país conocía su rostro y los dispositivos policiales para capturarle eran descomunales. Este nuevo ingreso en prisión significó, opuesto a lo que él pensaba, el inicio de su novedosa vida.

“Sin ellos habría acabado idiotizado o, quizás, suicidándome”. “Estuve años intentando matar al Lute. Yo abominaba del Lute”. El día de hoy se muestra considerablemente más reconciliado con el mito, satisfecho de que los años hayan transformado el perfil novelesco del que fue el criminal mucho más buscado por la Policía española en los tiempos de Franco en un “símbolo de resistencia, de dignidad y de perseverancia”.

La Reforma De Las Pensiones Que Tiene Planeado Escrivá Favorecerá A Quienes Hayan Cotizado Menos En El Final De Su Vida Laboral

De ahí que, en el momento en que en 2006 una denuncia de la que entonces era su mujer por unas supuestas amenazas y agresiones físicas volvía a ponerle bajo sospecha, ciertos desearon ver en aquel episodio una especie de venganza de ese destino revanchista. La Justicia resolvió a favor suyo en 2008 absolviéndolo y destacando los intereses espurios de la denunciante, pero la huella que dejó el proceso sigue siendo evidente en su rostro cuando regresa a aquel tema. Entonces, ahora en el penal de El Puerto de Santa María, quiso estudiar y se sacó la prueba de acceso al bachillerato para adultos. Los instructores del centro Padre Luis Coloma de Jerez iban a examinarle a la prisión.

Un año después Eleuterio Sánchez se fuga tirándose de un tren en marcha cuando era movido del penal del Dueso a La capital de españa. Tras ser capturado ingresa en la prisión del Puerto de Santa María, donde recibirá un trato inhumano. Pese a las dificultades burocráticas, El Lute decide ponerse a estudiar. Vuelve a fugarse en la Nochevieja de 1971, pues, como confesará en sus memorias, no había nacido para estar entre rejas. Odiado y admirado por igual, el país va a estar en vilo.

La justicia franquista aprovechó para proporcionar el hecho con su historia, y decidió condenarle a muerte. Poco después, eso sí, le conmutaron la pena por la de 30 años de cárcel. Abogado español, nacido en el vecindario salmantino de Los Pizarrales el 15 de abril de 1942 en el seno de una familia de mercheros.

Público

Reiterar hoy ese acercamiento, con la rigidez de los protocolos penitenciarios, sería casi inimaginable. “A la joven democracia le venía muy bien entonces dar esa imagen de flexibilidad y apertura, y desterrar así el tufo franquista de las instituciones españolas”, piensa. El 1 9 de junio de 1981 , el Consejo de Ministros, encabezado por Leopoldo Calvo-Sotelo, indulta a Eleuterio Sánchez. Al día después, abandonaba la prisión de Alcalá de Henares, tras 18 años de reclusión.

Fue entonces condenado a muerte por un Consejo de Guerra, pena que fue conmutada por la de 30 años de cárcel. Por su vida de continuas escapadas, Eleuterio interesó durante años a escritores y sociólogos, tal como a productores, directores y cantantes, hasta el punto de haber cobrado más de cinco millones de pesetas por “explotación de imagen”. En la cárcel del Puerto de Santa María aprendió a leer y redactar, se hizo electricista y empezó a estudiar Derecho, fundamento por el cual fue castigado en celdas particulares.

En el momento en que los hijos la lían parda, sus mamás señalan con el dedo acusador a las malas compañías. Del Lute dijeron eso, que se había juntado con quién no debía. “Ya lo he contado en tantas oportunidades… He escrito mi vida para no tener que explicarla, mas estoy condenado a llevarlo a cabo una y mil ocasiones”, gruñe entre bambalinas. Llegó con retardo a la entrevista y advierte de que saldrá pitando, pues debe firmar libros.