Una vez que el bote ha encallado, Jim desciende y empieza a recorrer la isla por su cuenta. Avanza entre los arbustos y mira de manera cuidadosa las particularidades de la naturaleza de la isla. Oculto entre la maleza, es testigo de una discusión entre Silver y Tom, uno de los marineros leales. Puesto que Silver no logra convencer al marinero, le quiebra la espalda con su muleta y después lo apuñala. No ve la oportunidad de volver y debe seleccionar entre morir de hambre o morir a cargo de los rebeldes.
Treinta años mas tarde, Robert le dedicaría la obra Un jardín de versos para niños, la cual es hasta la fecha la obra infantil favorita en Gran Bretaña. El encargado de tal labor fue el capitán británico William Thompson, que con su barco Mary Dear debía salvaguardar lo que el día de hoy se conoce como el Tesoro de Lima. Un botín lleno de monedas de oro, plata, diamantes y una estatua de la Virgen María de tamaño real de oro macizo. Al irse de Perú, la avaricia ha podido con Thompson y sus hombres, que mataron a los soldados y curas españoles dentro del barco y se dirigieron hacia la Isla del Coco, donde sepultaron la recompensa.
En una suerte de epílogo, Robert Louis Stevenson brinda información descriptiva sobre el origen de La isla del tesoro. Empieza diciendo que es más que un simple narrador de historias, pero que el público no reconoce el resto de su obra. Hasta La isla del tesoro, Stevenson había publicado ensayos, relatos de viaje y cuentos. Después de varios intentos fallidos, a los 31 años, inmediatamente después de regresar de su primera estadía en los USA, empezó a escribir esta novela durante una visita a sus padres en Escocia.
La Merica: Italianos En Busca De La Tierra Prometida
El ritmo de esta historia es tan dinámico como las peripecias de Jim. Con John Silver, Stevenson influyó en la imagen que en la actualidad tenemos del pirata lisiado, hosco y con un loro al hombro. A lo largo de los siglos que han pasado, se han realizado más de 500 expediciones en la isla. El gobierno del país finalmente prohibió la entrada para estas ocupaciones en 1994. En 1818, Bennett Grahame, que capitaneaba el HMS Devonshire en una investigación costero en el Pacífico Sur, terminó por transformarse en pirata después de amontonar mucho más de 350 toneladas de oro que robó a barcos españoles.
La isla se convirtió en su retiro dorado, un lugar muy bello, sí, pero también bastante lejano de sus amigos, el ajetreo y, en definitiva, la vida. Stevenson se sintió desterradoe intuyó que nunca acumularía las fuerzas necesarias para huír de allí. Tras regresar de un viaje a Sídney, Stevenson se estableció definitivamente en la isla de Upolu, en Samoa, donde se hizo crear una vivienda a la que llamó Vailima.
Sobre El Autor
Se convirtió en un ferviente defensor de los derechos de los samoanos y estos lo apodaron Tuisatala, “narrador de cuentos”. Su influencia fue tal entre los samoanos, que le consultaban para pedirle consejo, y pronto se implicó en la política local. Estaba convencido de que los gobernantes de europa que habían sido nombrados para gobernar a los samoanos eran unos incompetentes.
Que sepamos admitir a un pirata se lo debemos, en gran parte, a Stevenson. La Isla del Tesoro no es la única, pero sí la mucho más célebre narración de piratas que hay, y es en esta novela donde podemos encontrar múltiples de las especificaciones que asociamos a estos hombres. Un pirata es alguien sanguinario, bebedor de ron, conocedor de mil sitios y también historias, que anda vestido con un abrigo largo, un tricornio en la cabeza, un catalejo bajo el brazo y, probablemente, sin una pierna y con un loro sobre el hombro. Pero sería injusto no responsabilizar también a varios de los varios artistas que han ilustrado este relato y que transcurrido el tiempo se han convertido en referentes visuales inevitables.
A La Búsqueda De Los Tesoros
Pese a sus dificultades, Robert ingresó en la Universidad de Edimburgo en el momento en que tenía dieciséis años para lograr continuar los pasos de su padre y convertirse en ingeniero de faros. Pero en vez de ser popular por sus dotes intelectuales, Robert se hizo famoso por su vestimenta singular y su accionar escandaloso. Vestía un sombrero de ala ancha y un gabán de terciopelo infantil, por lo que recibió el alias de “chaqueta de terciopelo”. En compañía de su primo Bob, Stevenson comenzó a fumar hachís y visitar burdeles, y a los 22 años se declaró agnóstico, incrementando de esta manera la decepción de su padre. Todo ello se agudizó cuando Robert se opuso a seguir estudiando Ingeniería y quiso estudiar Derecho. Para colmo, a los 26 años, en 1876, se enamoró de una mujer separada, diez años mayor que él y de fuerte carácter, Fanny Van de Grift Osbourne, que llegó desde el lejano Oeste con una pistola en la cintura y un cigarrillo en la boca.
Entre los individuos centrales, John Silver es el único que tiene un carácter especial y contradictorio. En contraste a sus compañeros piratas, tontos, descuidados y borrachos, no solo actúa con inteligencia, sino se comporta compasivamente con Jim. Es viable percibir la simpatía que Stevenson siente por este personaje, puesto que en el final de la novela Silver logra huir.
La Isla Del Tesoro – Robert Louis Stevenson
Los marineros, que hasta ese instante obedecían las órdenes y se mostraban de buen humor, de repente consiguen una expresión seria y sólo siguen las órdenes a regañadientes. Silver, por su parte, quiere eludir un ataque bastante temprano de los amotinados, pues no posee el mapa en su poder. Él elige atacar cuando ahora hayan encontrado el tesoro. Smollett reconoce esto y da a Silver la posibilidad de calmar los ánimos con una excursión por tierra estable. Tras una resolución espontánea, Jim salta a uno de los botes y viaja a la isla.