En noviembre de 1996, Antonelli fue internada en la sección psiquiátrica de un centro sanitario de Civitavecchia, donde continuó hasta hace precisamente diez años en el momento en que se trasladó a Ladispoli, a pocos km de la capital italiana. Fue sentenciada a tres años y medio de prisión en 1991 por tenencia de estupefacientes, pero la actriz siempre sostuvo que la sustancia era para consumo personal. De expresivos ojos claros y desbordante sensualidad, la actriz logró el éxito en el cine erótico que tuvo un hueco importante en la década de los setenta, pero también fue inspiración de directivos como Luchino Visconti en “L\’innocente” (“El inocente”, 1976). Visconti le dio el papel personaje principal del que sería su último largometraje. “Salvemos a Laura Antonelli”, escribió Banfi en una carta apuntada al entonces primer ministro, Silvio Berlusconi, y publicada en \’Il Corriere de ella Sera\’. Pero la intérprete, ya en graves condiciones psíqucas y físicas, expresó a través de su abogado su deseo de permanecer en la sombra.
Ya no era el mito erótico del pasado, sino más bien un juguete roto, instalado en un centro siquiátrico, donde fue perdiendo la consciencia de quien había sido. Dudo de que en estos últimos años la recordara absolutamente nadie, cuando en sus buenos tiempos había encandilado a millones de hombres con sus eróticas películas. Laura debutó en el cine con “Le Sedicenni” , un film dirigido por Luigi Petrini. Más tarde fue apuntada por Alberto Sordi en “El Gran Amante” , película en la que también intervino Anita Ekberg; acompañó a Vincent Price en “Dr. Goldfoot And The Girl Bombs” , sátira apuntada por Mario Bava; protagonizó “El Exitación De Venus” , film apoyado en una novela de Leopold von Sacher-Masoch; y compartió créditos con la lengua francesa Jean-Paul Belmondo en “Gracias y Desgracias De Un Casado Del Año II” . En 1971 también formó una parte del reparto de “Sin Móvil inteligente Aparente” , thriller con la presencia de Jean-Louis Trintignant.
Otros títulos de esta década son “Casta y Pura” , con el protagonismo masculino de Fernando Rey, “La Veneciana” , erotismo con Jason Connery, y “Rimini Rimini” , comedia de Sergio Corbucci. La película era “Malizia”, un largometraje dirigido en 1973 por Salvatore Samperi, y en ella aparecía como una mujer provocativa y muy sensual, una imagen que le convirtió en un símbolo sexual, primero para los italianos y luego para todos los europeos. En los primeros años de los 70, interpretó varios papeles como actriz, pero el papel que verdaderamente le lanzó a la popularidad fue el de una asistenta doméstica que hacía enloquecer al señor de la casa en la Sicilia de los años 50. “Laura Antonelli muere a los 73 años; habitual y seductora actriz italiana” . Los derechos de propiedad intelectual de las críticas corresponden a los individuos que las han realizado y al portal Palomitacas. Si quieres o precisas hacer uso de alguna crítica, vas a deber pedir permiso expreso a su autor o ponerte en contacto con nuestro servicio de soporte.
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Lástima que tiempo después, ya en la década de los 90, su estrella declinara. Se transformó en una mujer obesa, víctima de una aguda depresión. Posiblemente su ruptura con Belmondo tuviese que ver en ello.
Su pareja en esta coproducción hispano-italiana era nuestro José Sacristán, que en calzoncillos, como prototipo de un macho de andar por casa, daba réplica cariñosa a la candente actriz. El día en que asistí a entrevistarla me hallé a Mónica Randall. Pero entonces era novia de Sacristán y por aquello tan femenino de que hay que procurar de que “no te la peguen”, no perdía ojo de los movimientos de “su Pepe”, muy entretenido con su papel. La actriz Laura Antonelli, mito del cine italiano de los años 70 y 80, ha fallecido este lunes de un infarto a los 73 años de edad. El cuerpo de la intérprete fue encontrado en su apartamento de Ladispoli, cerca de Roma, a primera hora de la mañana por su asistenta. Un triste final para una extendida vida delante de los focos llena de luces y sombras.
Laura Antonelli, Una Mujer Compleja Con Una Vida A La Deriva
Laura practicó gimnasia rítmica desde su niñez y estudió Educación Física en Nápoles antes de trabajar como profesora de gimnasia en un centro de Roma. A comienzos de los años 60 comenzó a trabajar como modelo, llegando a ser imagen promocional de Coca-Cola. Se formó en educación física en Nápoles y, más tarde, se trasladó con su familia a Roma, donde empezó a trabajar como profesora hasta el momento en que en 1969 el director Massimo Dallamano descubrió su hermosura y le abrió las puertas de la enorme pantalla. El 17 de marzo de 2000 fue absuelta de una condena de 3 años y medio de prisión que le había sido impuesta en 1991 por tenencia de estupefacientes. Tras 9 años de arresto domiciliario un Tribunal decidió que era para uso personal y no para ser vendida.
Este cineasta le ha propuesto protagonizar su filme “Venere in pelliccia”, que debido a su enorme carga sexual fue censurado en la época y no pudo ser estrenado hasta 1975, bajo el título “Le malizie di Venere” (“El placer de Venus”) y con esenciales ediciones. Aquellos años dorados para la actriz, no obstante, no duraron mucho y Antonelli cayó hasta hundirse en un pozo profundo de depresión, soledad y drogas. Más vale pasar desapercibido, la fama y el dinero simple son malos compañeros. Laura, que jamás se casó, se retiró del cine a principios de los años 90. Su revelación internacional como sex symbol se produjo con “Malicia” , historia erótica con el co-importancia del joven Alessandro Momo, con quien volvió a encajar en “Me Agrada Mi Cuñada” , film afín que fue dirigido, al igual que “Malicia”, por Salvatore Samperi. Momo falleció a causa de un incidente de motocicleta en 1974.
Series De Laura Antonelli Como Actriz
Laura Antonelli vivió los últimos años de su historia gracias a una pensión de 510 euros, la asistencia de la Iglesia y de ciertos fanes incondicionales que le mandaban dinero y regalos. Fue una tarde lluviosa del otoño de 1978 en el momento en que estuve frente a entre los mitos del cine italiano, la deslumbrante Laura Antonelli. La cita, en un chalé del madrileño vecindario de El Viso, en un descanso del rodaje de la película Camas calientes, título bastante orientativo para que les evite dar pormenores argumentales.
De 1972 a 1980, fue la compañera del actor Jean-Paul Belmondo . Falleció tras padecer un ataque al corazón el 22 de junio del año 2015 a la edad de 73 años. Está sepultada en el cementerio de Ladispoli, localidad metropolitana de Roma, Lacio . Pero Luchino Visconti supo ver más allá de esos papeles pueriles y la contrató para hacer “L\’innocente”, que le abriría las puertas a otro tipo de cine.
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Eso ocurría en los noventa en unos años en los que la imagen de Antonelli se encontraba lejos de parecerse a la de sus años de esplendor, aquellos en los que formó una increíble pareja con el francés Jean-Paul Belmondo. Actriz de cine italiana nacida el 28 de noviembre de 1941 en Pola (Italia; el día de hoy Pula, Croacia). Significó su revelación internacional como símbolo erótico al lado del joven Alessandro Momo. La cercanía con Jean-Paul Belmondo propició que entre los dos se iniciara un romance. Antonelli murió en Ladispoli el 22 de junio de 2015, a los 73 años, de un infarto. Antonelli estaba casado con el editor Enrico Piacentini pero se divorciaron.
Laura Antonelli
Y un año después se reencontraron en \’Doctor Casanova\’, de Claude Chabrol . Juntos estuvieron prácticamente nueve años, aunque jamás llegaron a vivir juntos -él vivía en París, ella en Roma–, y su romance estuvo salpicado de notorias crisis. Probó fortuna en el cine cómico de la época, para procurar superar su imágen de sex symbol, pero tras múltiples fracasos sentimentales, empezó un retiro voluntario. Aquella actriz que Luchino Visconti escogió para su película El inocente, me fascinó.
A fines de los años 80 la actriz dejó de manifestarse de a poco en la enorme pantalla pero unos años después Salvatore Samperi la persuadió a fin de que protagonizara la segunda de una parte de \’Malizia\’. Lo que había de ser un regreso triunfal de la estrella a las pantallas del cine se convirtió en un genuino fracaso comercial y un infierno para la actriz. La intérprete se sometió a una operación de cirugía que le desfiguró el rostro y cayó en una profunda depresión.