Josefa Ortiz de Domínguez pasó a la historia con el sobrenombre de «la Corregidora de Querétaro». Una mujer con fuertes convicciones sociales que se convierte en una figura clave en la independencia de México. José Miguel Domínguez Alemán (14 de enero de 1756 probablemente en la Localidad de México – 22 de abril de 1830 en la Localidad de México) fue un nuevo funcionario colonial español en Nueva España que participó en el movimiento independentista mexicano.
Asimismo fue miembro de un comité de gobierno de transición en el período entre la abdicación del emperador mexicano Agustín de Iturbide y la instalación de Guadalupe Victoria como el primer presidente de México independiente. Su esposa, Josefa Ortiz de Domínguez , asimismo conocida como La Corregidora , fue una heroína de la independencia mexicana. La sociedad Novohispana se encontraba compuesta por indígenas, españoles, negros, criollos, mestizos, mulatos y las llamadas castas. El ictus deja también importantes secuelas sicológicas que asimismo están afectando a Luismi. Se siente “muy complacido a la vida por haber despertado”, pero los avatares son ineludibles cuando la vida te ofrece un revés como este. “Toda esta gente que me ve ha de estar pensando, \’¡vaya suerte tiene este pringaete\’”, afirma Luis Miguel con sonrisa irónica mientras que su esposa, una amiga y yo, empujamos su silla de ruedas por los jardines de la Fundación Instituto San José.
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El virrey Félix Berenguer de Marquina lo nombró corregidor de Querétaro . Domínguez se opuso a la apropiación de las propiedades religiosas por parte del virrey José de Iturrigaray en 1805. En 1808, ha propuesto al gobierno de la ciudad de Querétaro que se uniera al gobierno de la Ciudad de México para establecer una junta para la colonia, para gobernar Nueva España en nombre del depuesto rey Fernando VII .
El encarcelamiento durante más de diez años en el convento de Santa Teresa y, más tarde, en el de Santa Catalina de Siena, no mermaría su esperanza en la revuelta. Josefa Ortiz fue la promotora de un grupo de miembros que al igual que ella, eran contrarios al poder imperante y aspiraban a nuevos ideales políticos y sociales. Josefa Ortiz posicionó ideológicamente a su marido, y arriesgándose a ser descubierta, ofrecía su propia casa como espacio para asambleas conspiratorias de carácter marcadamente político y de estrategia militar. La desaparición prematura de sus padres supuso el ingreso en el Instituto de San Ignacio de Loyola Vizcaínas, implicando la pérdida de cobijo del campo familiar. Este suceso resulta esencial porque, aparte de aprender a leer y escribir, allí conocería fortuitamente a Miguel Domínguez, quien acabaría siendo su marido. Murió en la Ciudad de México en 1830, tenía 74 años, un año tras la desaparición de su mujer.
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Si la vida del indio ciervo era terrible y dolorosa pese a sus defensores, la del esclavo negro, que no contaba con éstos, debió haber sido arroz. En el mes de septiembre de 1537 denuncióse por vez primera una conspiración de negros; afirmábase que cansados de la esclavitud pretendían adueñarse del poder de la Colonia. Descubierta la conspiración, el Virrey don Antonio de Mendoza ordenó una encarnizada persecución por la que fallecieron muchos infelices esclavos; múltiples de ellos fueron destazados y salados para presentarlos al Virrey, como prueba de que se había cumplido con su orden. Varios de estos negros, en su afán de liberación, escapaban con frecuencia ocultándose en la falda del Citlaltépetl. LECTURAS HISTORICAS MEXICANAS 623 población, el Virrey concedía a éstos, si era su voluntad irse a la villa, que quedaran relevados del servicio personal a lo largo de veinte años. Se dio por jurisdicción al nuevo poblado, según el pa recer de Soto y Calderón, ~na extensión de terreno de ocho leguas de largo por cuatro de ancho.
Y para “su mayor hon ra”, se le concedieron por armas las Armas Reales, las que deberían fijarse en las puertas y en las partes públicas. Los treinta pobladores y sus descendientes fueron declara dos nobles de solar y de linaje popular. Todas y cada una estas mercedes destacables, superiores con bastante a lo preparado en la Real provisión de 13 de julio de 1573, y las ambiciones del Cabildo cordobés motivaron posteriores pleitos por los que Córdoba estuvo a puntito de perder su título de villa.
Acervo Documental De La Unidad De Avance Político Y Promuevo Cívico
Hoy recibí la visita del doctor Atl que viene a comunicarme que el Ejecutivo Federal afirma monumento nacional el histórico Instituto de San Nicolás de Hidalgo de esta ciudad. La Corregidora fue entonces denunciada por el capitán Arias por su participación en el movimiento insurgente, y encerrada primero en el convento de Santa Clara en Querétaro y después en el convento de Santa Teresa de Localidad de México. Al principio fue bien tratada debido a su estado de gravidez, pero más tarde, debió permanecer tres años encerrada en el convento de Santa Catalina de Siena. En octubre de 1810, los rebeldes criollos estaban organizando una revuelta para levantarse contra la autoridad del virrey.
Capitulo 1 Antecedentes Históricos 11 Córdoba Localidad De Los 30 Caballeros
Estuvieron en contacto con el padre Miguel Hidalgo en Dolores , Guanajuato, de la misma Domínguez. También formaron una parte de la conspiración en Querétaro los hermanos Emeterio y Epigmenio González, como armadores de los rebeldes. Domínguez era un criollo (español nativo de América), si bien sus padres eran de España.
José Rico Romero El C Andévalo, 2014 José Rico Romero Asesor Cultural De La Hermandad El Cerro De Andévalo, 2014
Al lado de llamativas visualizaciones de portadas de viejas publicaciones, el libro proporciona un listado completo, ordenado por provincias, de los socios al colectivo, varios de los cuales disponen de apunte biográfico y fotografía. 2.El virrey mandó aprender a doña Josefa y, con enormes precauciones, la encerró, primero en el Convento de Santa Teresa la Vieja, de la Ciudad de México, y después en el de Santa Catalina de Siena. Una vez consumada la independencia, se negó a recibir cualquier recompensa por su contribución a la causa libertaria. Sus restos fueron enterrados en el Convento de Santa Catalina, de donde fueron exhumados, con enormes honores, y trasladados a Querétaro, cuyo gobierno la declaró Benemérita del Estado. En este momento es siendo consciente de que debe aprender a vivir de otra manera, pero su curiosidad e inquietudes políticas no cambiaron.
Naturalmente él formaba parte de la junta rebelde y conocía perfectamente a los líderes del movimiento y los almacenes de armas. Pero con una situación tan complicada donde se le demandaban detenciones, Miguel avisó de la novedad a Josefa Ortiz. En un intento de desmarcarse de los hechos y eludir probables represalias, ciertas fuentes comentan que tras ofrecerle la noticia a su mujer, la encerró en su habitación. Pero el empeño de Josefa y la necesidad de resguardar a los rebeldes logró que se arriesgara y pudiese avisar al capitán Ignacio Allende de la situación, quien a su vez notificaría a Miguel Hidalgo.