El libro – me adelantaré a decir que no lo he leído jamás – tendría poder para transformar un rostro difuso en un ser concreto. Poder trabajar o no tener algún trabajo tampoco puede ser concursivo, y mientras no esté garantizado el trabajo para todos, la sociedad tiene que indemnizar de alguna manera a quienes margina del ejercicio del derecho al trabajo. La protección del desempleo, no es -pues- algo caritativo, sino un imperativo de justicia. La segunda diferencia fundamental concierne a la metodología del cambio transformador del orden popular. Reconsiderar de qué manera fue el socialismo vivido por Pablo Iglesias nos hace meditar inevitablemente en las profundas diferencias que existen con respecto al socialismo europeo de hoy. Si bien de ninguna forma intento agotar el inventario de todos aquellos rasgos de la trayectoria de Pablo Iglesias, que son merecedores de cuenta, no me resisto a la tentación de apuntar, siquiera de manera esquemática, varios de los que pueden dar cuenta de forma certera de su identidad política, intelectual y hasta escencial.
Los tres hicieron el viaje a pie, tirando de un pequeño carromato en el que llevan los pocos bartulos que tenían. En la ciudad más importante, la madre tiene que pedir limosna y también ingresa a los 2 hijos en el Hospicio de San Fernando. Allí, el joven Iglesias termina los estudios primarios y elige el curso de tipógrafo como trabajo a estudiar. Para continuar gozando de los servicios de La Central, por favor, lee y admite la política de privacidad. En misma década se produjo otra más traumática, cuando los incondicionales de Francisco Largo Caballero y también Indalecio Prieto comenzaron una disputa sobre si debían ayudar o no con el nuevo régimen de Primo de Rivera.
Vaya, pues, para el autor, mi reconocimiento personal y el agradecimiento en nombre del Partido Socialista Obrero Español. “Raya en lo absurdo ver a una porción de seres andar desnudos, carecer de albergue y fallecer de hambre, en el momento en que hay casas inhabitadas, ropas y calzado que estropea el tiempo, no la utilización, géneros alimentarios de todas clases que se pudren y pierden por no haber sido entregados al consumo en el instante preciso”. Con la Internacional declarada gubernativamente fuera de la ley , las reuniones volvieron a la clandestinidad, no obstante aprovecharon las redes de sociabilidad de los tipógrafos. En la ciudad más importante de España, sin el socorro del hermano de Juana Posse que había fallecido, se instalaron en una buhardilla de la plaza de la Morería y malvivieron con lo poco que ganaba la madre en una banca de lavar del Manzanares.
Pablo Iglesias: La Vida Y La Epoca Del Principal Creador Del Psoe Y Ugt
Ahí están, en una enternecedora cercanía, el “estimado profesor” o “ciudadano Federico Engels” – que le solicita que, por favor, le siga tuteando- o Jules Guesde, Paul Lafargue, Karl Kausky, W. Liebknecht o Albert Thomas. Es tal como los enormes líderes de la Internacional se asoman, a través de estas cartas, a la vida no sólo de Pablo Iglesias sino del socialismo español. Es el año en que se celebró por vez primera en España la día de pelea del Primero de Mayo. Iglesias encabezó una impresionante manifestación en Madrid y fue el responsable de entregar al Gobierno las reclamaciones de las reformas legislativas, entre ellas la reducción de la jornada laboral a ocho horas y la prohibición de usar niños en el trabajo.
En 1901 por Madrid, Almería, Jaén, Linares, Málaga, Puebla de Cazalla, Oviedo, Avilés, Gijón, Santander, Toledo, Burgos, Miranda de Ebro, Valladolid, Mataró, Vitoria, Bilbao, Alicante y Valencia. Las de 1903 son las únicas elecciones en que El Socialista no facilitó el nombre de los candidatos socialistas. Como puede verse por lo expuesto, y sabiendo que tan solo nos hemos referido a 2 facetas concretas, la labor de Iglesias y de los socialistas y sindicalistas que sumaron conjuntamente sus sacrificios, constituyó un impulso modernizador difícil de igualar. En el Congreso celebrado el año 1888 se propugnaba “la enseñanza general científica y particular de cada profesión a los individuos de uno u otro sexo”. Además, se incluía la jornada laboral de ocho horas, cuando lo normal eran 12 y catorce, la prohibición del trabajo a los menores de catorce años y la exigencia del descanso “un día por semana”.
Pablo Iglesias La Vida Y La época Del Fundador Del Psoe Y Ugt
Pero lo que no alcanzábamos a entender, explicado de otra forma a aceptar ni justificar, es que debía ver Pablo Iglesias o los instructores socialistas de Sistema con todo aquello. Lo que, desde luego, veíamos clarísimo es que tal decreto-ley en teoría antiterrorista era a la vez (no sé si sobre todo), un decreto-ley antidemocrático y enemigo de la libertad de pensamiento y de expresión. Es de este modo como trabajan las dictaduras más allá de que se disfracen, por lo demás, ineficazmente, como Estado de Derecho.
Formado en las filas de la Asociación En todo el mundo de Trabajadores, donde tuvo la oportunidad de saber a las máximas figuras del socialismo como Marx yEngels, con el que sostuvo una atrayente relación epistolar, fue consciente desde muy temprano de la relevancia suprema que para la sociedad por norma general, y para los trabajadores particularmente significaban la educación, la capacitación y la cultura. La trágica y creciente desigualdad entre los pueblos, mucho más acentuada que la desigualdad interna de las naciones desarrolladas, reclama urgentemente actuaciones tan enérgicas como las que en otro tiempo supieron los socialistas adoptar frente al colonialismo, demandando el derecho de los pueblos a su autogobierno. Desde los orígenes del socialismo se viene afirmando que la igualdad entre los hombres significa no sólo igualdad de derechos, abolición de permisos, sino más bien asimismo abolición de las maneras de dominación y explotación que tienen la posibilidad de derivarse del empleo despótico y también incontrolado de la propiedad.
Pablo Iglesias Posse
España permaneció neutral a lo largo de la Primera Guerra Mundial, y ello a pesar de la atrancada posición del Gobierno. La actitud de los socialistas y de su líder basculó entre el pacifismo y el matizado acompañamiento a los aliados. Pero, a pesar de la buena coyuntura para la industria de españa, las condiciones de vida de la clase obrera empeoraron en el medio plazo. En 1916, Iglesias, que continuaba enfermo, se desplazó a Barcelona para ser intervenido.
O sea, se procuró mediar en la mesa negociadora de las tarifas, pero sin resultados. Iglesias hace aparición aquí como un factor considerable entre las desconcertadas autoridades, que en balde procuraban atraerlo a sus posiciones. En el final, la victoria de los linotipistas socios sentó las bases de futuras negociaciones.
Iglesias, Pablo (1850-
Pensamos que no es conveniente rehuir la consideración de estas diferencias, ni eludir el tema aludiendo sólo al legado moral de Pablo Iglesias, como si lo único vigente de su historia y de su obra fueran sólo sus ejemplares virtudes ético-civiles. Por el contrario, es conveniente aclarar -siquiera sea en lo más primordial- cuáles son esas diferencias, y exactamente en qué radica la continuidad de reacciones y planteamientos, pues ello afecta a la definición de nuestra identidad, al tiempo que nos asiste a saber en qué sentido y exactamente en qué medida prosiguen siendo socialistas las entidades que él tan laboriosamente contribuyó a crear. Tras Pablo Iglesias, iniciados en su magisterio, hace aparición una generación de socialistas -Prieto, Besteiro, Largo Caballero, De los Ríos- que avanzan en la calidad y profundidad de sus elaboraciones políticas y estratégicas y que justamente forman una parte del legado del socialismo en España. No obstante, su labor difícilmente hubiera encontrado cauce de realización de no contar con “la brecha” abierta por sus antecesores que, bajo el marcado liderazgo de Iglesias, abrieron el sendero disponiendo por todo patrimonio de una incontestable pasión por la igualdad y de la estable determinación de no dejarse vencer por las adversidades.
Biografías Que Citan A Este Personaje
Iglesias continuó trabajando en la imprenta de La República Federal y se mantuvo al día de las reuniones de la AGAI. La deriva de los hechos políticos situó las acciones de los socios en el misterio. El pronunciamiento del general Martínez Campos el 29 de diciembre de 1874 dio al traste con la República y situó a la Monarquía de don Alfonso. En aquella situación, las asambleas de los societarios eran de tapadillo y aprovechando cualquier resquicio legal. El empeoramiento de las condiciones en la tipografía y los bajos sueldos provocaron la huelga de 1878, cuyo sonado fracaso comportó la dispersión de sus convocantes y las temidas listas negras, en las que figuraba destacadamente el nombre de Pablo Iglesias.
El 2 de mayo de 1879, en la taberna-lugar de comidas Casa Labra, en la calle de Tetuán, se juntaron en una comida de fraternidad. La España de finales del siglo XIX, en la que comienza su andadura el socialismo hispano, era un país claramente retrasado, con un 70% de incultos, una enorme masa de niños y jóvenes sin escolarizar, con graves faltas en el magisterio y una población en la mayoría de los casos asentada en el medio rural. La enseñanza pública, a lo largo de la Restauración, no constituyó pese a sus hirientes faltas una preocupación destacada para los gobiernos turnantes. Las partidas presupuestarias destinadas a educación, retribución del profesorado y construcción de centros escolares llamaban la atención por su exigüidad. Es por ello que en estas cuartillas vamos a referirnos a un aspecto poco popular de la labor del dirigente socialista y que, no obstante, constituyó un esfuerzo singularísimo cuyas benéficas secuelas han contribuido en parte importante al progreso de nuestro país. Hablamos al notable esfuerzo modernizador que desplegó a lo largo de la mayoría de su existencia como dirigente político y sindical.