Acceso instantáneo a millones de e-books, audiolibros, gacetas, podcasts y considerablemente más. Las horas que ésta pasó aguardando fueron horas de incomodidad y ansiedad, horas iguales a las del marino que ve la tranquilidad después de la tormenta, y sucederse otra vez al mismo tiempo bonancible, que le calmaba, un nuevo y más furioso huracán. Preciso es creer, con lo que otros en idéntica situación han sentido, que la distancia del tiempo debió parecer en radical larga a los interesados, que cada minuto se trocó para ellos en una hora, y que, si hubiesen podido enviar al cielo, como Josué al sol, la tierra se habría instantáneamente cubierto de las mucho más oscuras sombras. Apartémonos de esta lúgubre, mortal escena, y os lo contaré todo.
Si hubo, pues, en algún tiempo mañana triste, lamentable, desgraciada y fatal, ninguna ciertamente lo fue tan en prominente nivel como la que se publicó en Verona la desaparición de Julieta; tan sentida fue de enormes y chicos que, en vista de la común lamentación, se hubiera creído, y no sin fundamento, que estaba en peligro la república. Mientras así obraba Romeo, Julieta, por su parte, no se desatendía, y como, excepto su nodriza que en clase de camarera la acompañaba de continuo, no tenía otra persona a quien abrir su corazón, confió a la expuesta su misterio, viniendo al fin a alcanzar que le prometiese su asistencia y fuese a inquirir de Romeo lo convenido entre él y Fray Lorenzo1347. Romeo y Julieta Romeo y Julieta Obra de teatro corta, Guion teatral Romeo y Julieta se encuentra dentro de las historias amorosas mas reconocidas de la literatura mundial del reconocido escritor de William Shakespeare. Los dos jóvenes amantes están profundamente enamorados el uno del otro, pero las familias se pelean entre sí. Esta obra literaria influyente explora temas como el cariño juvenil, el enamoramiento, la guía de los padres y otros temas similares.
He olvidado ese nombre y los pesares que trae consigo. El amor, que a inquirir me impulsó el primero; él me prestó su sabiduría y yo le presté mis ojos. No comprendo de rumbos, pero, si bien estuvieses tan distante como esa larga playa que baña el mucho más recóndito Océano, me aventuraría en pues de semejante joya375.
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Las exclamaciones de admiración pronunciadas a media voz por Romeo, fueron dadas por Teobaldo, sobrino de la señora Capuleto, joven muy fogoso y preparado siempre y en todo momento a fomentar altercados y contiendas. Además de Benvolio, acompañaba aquella noche a Romeo un joven alegre y decidor, llamado Mercutio, pariente del príncipe de Verona. Ya a lo largo del camino charla procurado desvanecer la melancolía y tristeza de Romeo a fuerza de chistes y ocurrencias, pero nada fue bastante a sosegar su espíritu. Habíale asaltado un triste presentimiento, por lo cual, sin ilusión ninguna ni deseos de divertirse, penetró en los refulgentes salones del suntuoso palacio de Capuleto. Para el desarrollo del guión de Romeo y Julieta de William Shakespeare, empieza con un fuerte atropello callejero entre personas de la familia de los Montesco y Capuleto.
Y se había, por su sutil proceder y sus bondades, tan bien ganado la intención de los ciudadanos de Verona, que era cerca del único confesor de ellos. Chicos y grandes le reverenciaban y querían, los altos magnates le pedían su voto en las situaciones difíciles y le dispensaban entero favor, en especial el señor de la Escala y las familias de los Montescos y los Capuletos. Y esto dicho y convenido, se apartaron los dos amantes sin que Romeo, a salvedad del consentimiento prestado, hubiera alcanzado otro favor.
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En este momento puedes personalizar el nombre de un tablero de recortes para guardar tus recortes. En ese momento ingresa al recinto Julieta en compañía de su madre, y al lado de su primo Teobaldo. Accedió la joven, y la buena ama, habiéndose dirigido a San Francisco, supo por boca del mismo Fray Lorenzo que Romeo iría, cual de práctica, a ver a Julieta y a enterarla de lo que creía hacer en lo futuro. Mientras esto pasaba, se realizó público en la ciudad el incidente sucedido a Tybal, y los Capuletos, para mejor reclamar justicia, cerrados de luto y llevando el cadáver de su deudo, se presentaron al señor de Verona, ante el que asimismo acudieron los Montagües, ansiosos de justificar a su pariente y de probar la agresión de su contrario. Reunido el Consejo, mandó que al punto se depusieran las armas, y en cuanto al hecho de Romeo, como había tenido lugar en defensa propia, la sentencia dictada fue la de perpetuo destierro. Fray Lorenzo, de quien más adelante se va a hacer amplia mención, era un antiguo doctor en teología, de la orden de religiosos inferiores, el que aparte de su vasta instrucción canónica era muy versado en filosofía, escudriñador profundo de los secretos de la naturaleza, y hasta tenido, en tal término; como inteligente en materias de magia y en otras ciencias reservadas, lo que en nada realmente atacaba su reputación.
Que oiga yo otra distinta voz que la mía en este lúgubre antro de muerte, o perderé el sentido. Los pensamientos, mucho más ricos de fondo que de expresiones, se pagan de su entidad, no de su ornato. Pobre es uno en tanto que puede contar su tesoro; pero el sincero amor mío ha llegado a tal punto, que a sumar no alcanzo la mitad de mi cabal fortuna593. Yo puedo informaros; pero el joven Romeo, hallado que sea, será más viejo de lo que era al tiempo de andar vos en su busca. Yo soy el mucho más joven de ese nombre en defecto de otro peor521. El criado que Capuleto mando con las invitaciones, no sabía leer, por lo que hallando por casualidad a Romeo y Benvolio, rogoles que le leyesen la lista de los invitados.
Guión De Romeo Y Julieta ¡una Obra De Teatro Fabulosa!
Su amor es ciego y se halla mucho más a gusto en las tinieblas.
De Noviembre Fray, Tú Sabes Qué Es Lo Más Esencial? Obra: El Mandamiento Primordial
Y para inmortalizar la memoria de esta firme conciliación, ordenó el señor de Verona que los cuerpos de los 2 infelices amantes fueran puestos juntos en el sepulcro que les vio fallecer, erigido en columna de mármol y cubierto de inscripciones. De esta manera, pues, entre las raras excelencias que se muestran en la ciudad de Verona, ninguna tan célebre existe como el monumento de Romeo y Julieta. Abriose el rollo y se vio que contenía la completa historia del suceso; hasta el nombre del boticario que había vendido el veneno, el valor de la sustancia y la ocasión en que se había utilizado. Todo quedó tan bien comprendido, tan fuera de duda que, para poder ver la situacion idéntico, solo hacía falta una cosa, estar presente. A tiempo que estas cosas se sucedían, pasaban por los contornos del cementerio los guardias de la ciudad, y notando el resplandor que despedía el panteón de los Capuletos, miedosos de que algunos nigromantes le hubiesen abierto para usos de su arte, penetraron en él y se encontraron abrazados a los 2 amantes, cual si aún diesen testimonio de vida.
Esto pasaba en Mantua, mientras en Verona tenían rincón los funerales de Julieta. De acuerdo con la vieja usanza del país, que da abrigo en un propio sepulcro a los parientes mucho más cercanos, la joven fue llevada al común panteón de los Capuletos, erigido en un cementerio inmediato a la iglesia de los Franciscos, el mismo en que Tybal descansaba. Y causa había para ello, porque la joven, además de su esplendente belleza y de las muchas virtudes de que la había dotado naturaleza, era tan dulce, sensato y modesta que reinaba en los corazones de todos. Y de esta manera influida por estas ideas, fue tan adelante su imaginación que se la figuró ver el aspecto o espectro de su primo Tybal, herido y chorreando sangre, pronosticándole que iba a ser enterrada viva en medio de cadáveres y descarnados huesos.