Cuando ha llegado la ambulancia al rincón, se intentó reanimar a la víctima. Los intentos resultaron inútiles y el niño falleció poco después. Su padre se suicidó hace mucho más de veinte años y su madre murió en 2008. Si bien padecía una sordera severa, había cursado hasta cuarto de solfeo en el conservatorio oficial de música, y poseía un alto cociente intelectual. En sus primeros años en prisión, se quejaba de que casi todo el dinero que ganaba trabajando en los talleres ocupacionales de la prisión se lo tenía que gastar en audífonos. En aquel instante, el asesino concertó una visita para reunirse con la agente inmobiliaria en un residencia.
Fue entonces en el momento en que engañó a una pequeña de 13 que vivía en su mismo bloque, en la calle de San Millán de Logroño. Ven, tu madre se ha puesto enferma, le dijo; pero no está en tu piso sino más bien en el mío. La niña se lo creyó, entró en la vivienda de Pachi (por ese diminutivo se le conocía) y allí fue en el momento en que él saltó sobre ella, la anudó a una silla, gritó todas las obscenidades que se le ocurrieron y, tras obligarla a practicar sexo oral, se masturbó. La cría perdió el saber y, en el momento en que lo recobró, su agresor le ha dicho –impresionantemente– que se fuera a su casa. Según explica la sentencia de ese antiguo caso, y como recoge el medio La Rioja, el acusado asistió a la sede de la inmobiliaria San Martín con el pretexto de conocer algún piso.
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Vecinos de la zona han indicado a EFE que el niño fué encontrado en el interior del portal donde vive el detenido. Esas personas cuentan que la víctima estaba jugando con otros pequeños en un parque situado junto al colegio Villa Patro, de donde un hombre se lo llevó. Se rumoreaba que un hombre había intentado raptar a múltiples niñas, sin éxito. Hace cuatro días se denunció a la Guarda Civil que un varón había invitado a una niña a irse con él para jugar, pero la pequeña no accedió.
Tras cumplir condena por la agresión a una niña en 1993, en 1998 protagonizaría el conocido como ‘crimen de la inmobiliaria’. Con la excusa de estimar comprar un piso, engañó a la víctima, una trabajadora de la entidad. Le asestó 16 puñaladas, la última, directa al corazón. La sentencia probó los hechos y fue condenado a 40 años de prisión.
“Nos llamabais locos y solo veníais dos y ahora ha debido fallecer un niño a fin de que vengáis todos a proteger al asesino”, aseguró una vecina a los agentes. Francisco Javier fue culpado en 1993 por atacar sexualmente a una mujer con una pena de 7 años de prisión. Cinco años más tarde, en 1998, mató a sangre fría a Carmen López, una agente inmobiliaria de Logroño.
Condenado Asimismo Por Otro Delito De Agresión Sexual
Era el último de los tres requisitos fijados por el producto 90 del Código Penal que le hacía falta por cumplir para pedir la independencia condicional, tras haber cumplido hacía tiempo tres cuartas unas partes de su pena y ver buena conducta. En primavera del año pasado, tres años antes que se extinguiera la pena, un juez acordó su excarcelación. La resolución no fue recurrida por la Fiscalía, según fuentes judiciales, y se realizó efectiva el 8 de abril. Año y medio después, Almeida volvió a ser detenido. Ahora, el presunto asesino de un niño de nueve años continúa bajo la custodia de la Guarda Civil esperando de pasar a disposición judicial. La Audiencia Provincial de Logroño condenó, en abril del año 2000, a Almeida a 20 años de prisión por un delito de asesinato con alevosía y a otros 10 años por agresión sexual con ensañamiento.No hubo mitigantes.
En aquel sitio le dio múltiples puñaladas hasta provocarle la muerte. Fue encontrado en el rellano del mismo edificio donde vive López de Castro. Allí solo lograron certificar su muerte, tras indicar que sufría síntomas de asfixia. El cuerpo del pequeño fue movido al Instituto de Medicina Legal de Logroño, donde se le practicará la autopsia. Aquella sentencia de 2000 también fijaba, en aplicación del artículo 76 del Código Penal que establece el tiempo máximo de cumplimiento, que, pese a que las penas por ambos delitos sumaban 30 años, no podría estar encarcelado mucho más de 25. Además, y según testigos, han manifestado de qué forma “un hombre se llevaba al niño mediante engaño”.
El Detenido Ahora Fue Condenado Por Asesinar A Una Mujer En 1998
Francisco Javier Almeida López de Castro, abogado y violador reincidente, y presuntamente autor del secuestro y asesinato del niño de 9 de Lardero , llevaba 16 meses en libertad. Según pudo comprender CASO ABIERTO, portal de sucesos e investigación de Prensa Ibérica, salió de prisión en el mes de abril de 2020, tras 22 años encarcelado por el popular como ‘crimen de la inmobiliaria’. Antes, ya había estado otros tres años y medio mucho más en la prisión. En 1993 fue condenado a 7 años de prisión por abusar de una pequeña, según ha podido entender CASO ABIERTO, cumplió la mitad. El presunto asesino de Lardero, tiene 54 años y pasó media vida en prisión.
Aseguran que fue “algo horrible” y no esperaban que Almeida que pudiera llevar a cabo algo de este modo. Los vecinos del edificio del centro de Logroño en el que creció Francisco Javier Almeida con su familia aún no han olvidado la violación que cometió “un chaval que parecía normal”. El mismo que en este momento ha matado, presuntamente, a un niño de 9 años en Lardero. En el momento en que solamente llevaba un par de años en la prisión, en 2000, habían pasado un par de años de prisión provisional. Pachi tenía la oportunidad de soliciar que le dejaran libre. Pero no fue el juez; fue él mismo quien mencionó que no.
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No han trascendido mucho más datos sobre la investigación al haberse dictado el misterio de sumario. A cargo de lo que aporte la investigación, lo que ya está claro es que Almeida es un agresor reincidente. Su traslado a la prisión de Logroño se produjo en febrero de 2020, tras ser clasificado en tercer grado penitenciario o semilibertad.
Allí, según un trabajador del centro que coincidió con él, mostró un comportamiento “ejemplar”. En esta prisión, estuvo cerca de 22 años, casi en todo momento de condena que cumplió por aquel crimen. En este intérvalo de tiempo, disfrutó de 39 privilegios de salida concedidos por el juez sin crear una cuenta ninguna incidencia, según fuentes penitenciarias. Los vecinos llevaban tiempo advirtiendo de lo que podía pasar.
Este hombre es peligrosísimo y tiene una gran cantidad de antecedentes penales. La primera oportunidad que Pachi Almeida delinquió fue por una agresión sexual en 1993, por la que fue condenado a siete años de prisión. Cinco años más tarde mató a sangre fría a Carmen López, una agente inmobiliaria de Logroño. El hombre convenció con engaños al menor asesinado hasta poder, presuntamente, llevarlo desde un parque próximo hasta su portal, en el número 7 de la calle Río Linares. “Este verano múltiples vecinas se han quejado de que había un hombre que acosaba a los niños”, afirma un hostelero de la región. Pachi, como es conocido el supuesto asesino, acaparaba todas las miradas por sus antecedentes, que varios conocían, y por los cualesya cumplió pena de prisión.