Vino luego Quispa a verme, con un gran presente de miel, pescado seco y fresco, micos, y papagayos secos, y vivos, y muchas carnes de monte, y otras cosas que entre ellos se estima, y me besó la mano y me dijo que para la multitud me mandaban trescientas fanegas de maíz. Yo le obsequié, y di otras cosas, con que salió contentísimo. Y mandar que entrara a esta pacificación; y de esta manera me nombró el provisor don Francisco Garavis, mi amigo, por cura y beneficiado del Valle del Coca y demás indios que poblase; y la Real Audiencia me dio poderes para que entrase gente conmigo, para apaciguarlos y atraer, y puesto en ejecución sucedió, como se verá en el capítulo siguiente.
La segunda localidad es Ávila y la otra Archidona, que en vecinos y también indios se diferencian poco de la primera. El testimonio de Ordóñez de Cevallos tiene el valor indiscutible de proceder de quien tomó parte en los acontecimientos, si bien participó desde el lado de las autoridades españolas. Viaje los que dedica, prácticamente íntegramente, a narrar las contrariedades de esta destacable aventura, donde intervienen personajes que cita por sus nombres, y que por su obra, publicada en vida del autor y de muchos de los citados en ella, ha podido ser recusada como falsa.
Vacunas Y Mujeres
Y ahora sintéticamente apuntemos algo de su biografía, siguiendo a Vázquez de la Torre. Hoy la mujer de un enorme cómico nos dejó, sin embargo lo que nunca va a desaparecer es su recuerdo. Isabel se ha marchado rodeada de sus hijos, quienes han afirmado la triste noticia al programa de televisión \’Corazón\’. Diez Minutos participa en múltiples programas de afiliación de marketing, lo que quiere decir que Diez Minutos recibe comisiones de las compras hechas mediante los links a sitios de los vendedores.
En este tiempo aprendido bastante sobre el virus que la genera, el SARS-CoV-2, pero nuestra mayor y mejor promesa procede de los trabajos que comenzó a efectuar unainvestigadora húngara, Katalin Karikó, hace 30 años. Su objetivo era desarrollar un nuevo tipo de vacunas que no requirieran ingresar en nuestro cuerpo patógenos mitigados, sino las normas para que nuestras células produjeran las proteínas del virus, las que debían activar nuestro sistema inmunitario, conocidas comovacunas de ARN mensajero. Decidió inocular a sus hijos, que han quedado asíinmunizados,y tras volver a Gran Bretaña dio a comprender este descubrimiento a la familia real.
Escultoras En Un Planeta De Hombres Y Su Fortuna En La Crítica De Arte De España (1900-
Tercera, que por esos 2 tributos venideros de San Juan y Navidad, no les pagaran. Cuarta, que les dejasen por dos años sin poblarse, a do ellos quisieran morir. Quinta, que para siempre no jamás no les quitasen sus atambores. Sexta, que por dos años no enviasen sus encomenderos españoles a todo aquel Valle. Séptima, que por dos años no les compeliesen a realizar puentes de madera.
La mujer de Tony Leblanc, Isabel Páez de la Torre, en la capilla candente de su marido, el actor Tony Leblanc, fallecido a los 90 años en La capital española. Hoy 27 de junio, Isabel Páez la que fuera esposa del conocido actor y cómico Tony Leblanc, ha muerto a causa de una grave patología; un cáncer de medula se llevaba la vida de esta mujer muy querida en España. Sus hijos han sido quienes han afirmado la triste novedad.
Muere Isabel Páez, Mujer De Tony Leblanc, A Los 85 Años
Los indios llevan, cuando van, y están en sus embriagueces), de aquella forma tuve trescientos y veinte indios y 40 hombres, y otros que venían. En llegando los caciques los prendían y echaban en colleras, y a los indios los dejaban ir a sus tierras, que sin cabezas es esta gente muy humilde. Y de esta forma prendí diez y siete cofanes de los de abajo; treinta y un caciques; de los de la guerra de Ávila, otros 40. A Laipiti, su cacique principal, le di presentes y a los otros menos; y de esta manera los envié libres a su tierra y mandé desmoronar aquel cerro, que es cosa de ver la destrucción que hace. Quedó de allí el camino robado para toda la vida, hasta el momento en que yo hallé otro, viniendo huyendo que salí a Senacato, que es el que ahora se usa.
Juan Miguel Paez De La Cadena Y Seix
Mandáronme dar aquellos señores mil pesos, y yo los pedí usados en cosas necesarias. Su Señoría dio quinientas camisetas; otro caballero doscientas moropachas y otros dieron otras dádivas, que sería todo otros mil pesos. Su Señoría predicó y ha dicho la limosna que era y de qué manera gastaba yo solo en lo que ahora llevaba cinco mil pesos, y que eran necesarios para sacar aquella gente muchas limosnas, y a cada peso echó cuarenta días de perdón. Dejé a Ortiz allí y compradas dos mil arrobas de algodón y dos mil frazadas y muchas camisetas y mantas blancas, y moropachas, y liquillas chicas para cubrir las indias, que de cada manta hacía 4, y las daba a señoras para que las repulgasen, que lo hacían con muchísimo gusto, sin muchas que brindaron ellas. Adquirí asimismo bizcocho y otras municiones, en que gasté los cinco mil pesos, sin diez mil en que me empeñé.
Quiere entonces pasar al Perú y va a recalar en Cebú, en donde se encuentra con su compatriota de Jaén, Cristóbal Espinosa de los Monteros. Tratado de las relaciones verdaderas de los reinos de China, Cochinchina y Champaá y otras cosas notables, y múltiples hechos de los auténticos, por don Pedro Ordóñez de Ceballos, presbítero. Juez y vicario general de Guamanga en el Perú y canónigo de Astorga (año de 1628. Jaén. Pedro de la Cuesta). El día de hoy es más evidente que nunca que el mundo necesita la ciencia. Isabel Zendalhizo su aparición estelar poco después deldescubrimiento ‘oficial’ de la vacuna de la viruela,cuando zarpó del puerto de A Coruña dentro de la corbeta ‘María Pita’ bajo el mando de Francisco Balmis, cirujano de cámara del rey. Según Antonio López Mariño, autor del libro ‘Isabel Zendal Gómez en los ficheros de Galicia’.
En el tercer mes del año de 1957 anunció Aguilar, de La capital española, la edición de una nueva serie de libros, en la que este renombrado editor denominó «Biblioteca Indiana», dirigida por don Manuel Ballesteros Gaibrois. Salió a luz el primer tomo, con cuatro relaciones de viajes, allí reimpresas, siendo la primera la del Clérigo Agradecido, de cuyo libro se reproduce la carátula de la edición príncipe. También se acompaña un mapa en que se indican los viajes de Ordóñez de Ceballos y los lugares a donde él llegó, figurando, naturalmente, allí Quito.
La tercera, que si se poblasen le diesen a cada cacique los sujetos, compeliéndoles a asistir a sus pueblos. La cuarta, que todos y cada uno de los españoles que el padre u otro capitán entrasen, no fueran a su tierra, y si hubiesen de pasar, solo una noche estuviesen allí, no obligándose a proporcionarles nada por dinero ni de balde; y si hiciesen algún agravio, lo tasasen al padre y le hiciesen pagar. La quinta, que por 4 años no compeliesen a ningún cacique a ir a Baeza.