El Acta de Independencia del Imperio Mexicano es el documento por el cual México declara su independencia de España, pasando de ser el virreinato de Nueva España al Imperio Mexicano. Fue redactado el 28 de septiembre de 1821 en el Palacio Nacional de la Localidad de México, sede del Poder Ejecutivo. La redacción fue llevada a cabo por Juan José Espinosa de los Monterios, secretario de la Suprema Junta Provisional Gubernativa. Otros líderes independentistas que también son afrodescendientes son Vicente Guerrero, Juan Álvarez, los hermanos Galeana y José Antonio “El Amo” Torres. Entre ellos, Vicente Guerrero ocupa un espacio favorecido dentro de los héroes afro que nos dieron patria.
La población afrodescendiente tenía presencia en distintos ámbitos y su postura respecto al surgimiento del movimiento insurgente dependió de varios causantes económicos y sociales. Como clase sojuzgada y una parte del pueblo bajo, varios han tomado partido por la causa insurgente, aunque asimismo varios de ellos formaron parte del Ejército realista. Este suceso añade mayor dificultad a un tema del cual poseemos muy pocas referencias y del que, indudablemente, nos falta bastante por saber. En este extraordinario vídeo elaborado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia se detalla de forma general el papel de la población negra en los sucesos que llevaron a la independencia de México. Mientras que Morelos y otros líderes insurgentes tenían una postura soberanista del nuevo país, la lucha terminó siendo encabezada por realistas del Ejército Trigarante que asimismo llamaba al rey español a gobernar el nuevo país. Ese día de 1821, uno de los líderes independentistas, Agustín de Iturbide, encabezó una simbólica marcha de entrada a Ciudad de México para marcar el final de la lucha por la independencia del imperio español, que pervivió exactamente 300 años.
Historia De La Independencia De México
Este fue el nacimiento de la red social afromexicana, y la razón por la que ciertos autores se refieren a nuestros orígenes africanos como nuestra tercera raíz. Antes que estallase la Guerra de Independencia, precisamente el diez % de la población era afrodescendiente, si nos ajustamos a las categorías en las que se clasificaban . Salvo indicación contraria, todos los contenidos de la edición electrónica se distribuyen bajo una licencia de uso y distribución “Creative Commons Reconocimiento 4.0 Internacional ” (CC BY 4.0). Puede consultar desde aquí la versión informativa y el texto legal de la licencia. Esta circunstancia debe de hacerse constar de manera expresa de esta manera cuando sea preciso. Villoro, Luis, El proceso ideológico de la revolución de independencia, México, Secretaría de Educación Pública, 1986.
Sus enemigos le decían “negro” en tono denigrante, pero él siempre se mostró orgulloso de sus orígenes. Como ya mencionamos, fue el único insurrecto que se mantuvo en pie de pelea hasta 1821, cuando se unió a Agustín de Iturbide para terminar de consumar la independencia. Es admirable la constancia, perserverancia y fuerza de voluntad de este hombre, que en las distintas pinturas que se le hicieron hace aparición blanqueado, acto que podría pasar como una ofensa para alguien que nunca se avergonzó de su color de piel. Seguramente estas consignas tuvieron un fuerte encontronazo en la comunidad afromexicana, aunque oficialmente correspondió a Vicente Guerrero (ahora como presidente de un México independiente, en 1829) producir el decreto que abolió la esclavitud. La gente con fenotipo negro se consideraban una raza indeseable, portadora de vicios e incapaz de adaptarse al avance, y un movimiento emancipador que los incluía en el centro de las demandas debió ser recibido con enorme entusiasmo y esperanza. La palabra Tlilxayac significa “máscara negra” en lengua Náhuatl, aquella que hablaban los habitantes del Valle de México antes de la conquista de españa y aún el día de hoy se escucha en algunas regiones del país.
En los campos y las montañas, al margen de las ciudades más importantes, se formó un nuevo elemento popular de las castas de los mestizos y los mulatos, que tomó el nombre de ranchero, que son labradores y ganaderos trabajadores y honrados. Con poca instrucción pero sagaz sabiduría, eran diestros jinetes acostumbrados a resistir cualquier adversidad natural y viviendo en corta sociedad. Esos hombres formaron el núcleo de los soldados voluntarios que lucharon por la independencia de la patria.
Más De Ual (Universidad América Latina)
A principios de noviembre, sus tropas bordean la costa y llegan hasta Zihuatanejo lugar en el que sumaron mucho más adepto. Con unos 2000 hombres Morelos toma Técpan, una población pequeña que se ubica en la Costa Grande del actual Estado de Guerrero. El movimiento por la independencia de México se inicia la madrugada del 16 de septiembre de 1810 con un pequeño grupo de indios, mestizos y criollos en su mayor parte sin instrucción militar alguna y armados con instrumentos de labranza; 4 meses después los rebeldes eran 100,000 con 95 cañones. Acabó el día 27 de septiembre de 1821 con la entrada del Ejército Trigarante a la Ciudad de México.
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Similares A Independencia, Revuelta Habitual; Resistencia Y Contrarrevolución
Por un lado, España se encontraba en su guerra de independencia en la Península Ibérica. El resto de países de europa estaban asimismo peleando contra el emprendimiento imperialista de Napoleón y no veían con pésimos ojos que España perdiese sus territorios americanos, deshaciéndose de un fuerte rival. En este contexto el 16 de septiembre de 1810 se causó el Grito de dolores. La independencia de México fue, de entrada, un emprendimiento criollo, campo más elevado en la escala social por ser los descendientes directos de los españoles, sin mezcla con cualquier otra raza, con lo que se consideraban como los predestinados a proseguir con el poder político y afianzar sus privilegios. Sin embargo, las diversas aspiraciones de todas las clases sociales llegaron a confundirse, hasta formar una sola unidad. A principios del Siglo XIX la sociedad novohispana se encontraba conformada y dividida por grupos sociales antagónicos, que convivían bajo una frágil y aparente tranquilidad, teniéndose entre todos gran desconfianza y mal disimulada antipatía.
Fue redactada por el historiador Carlos María de Bustamante; al instante de ser proclamada, Don Ignacio López Rayón se opuso a su firma, por meditar que era innecesaria; consideraba que la independencia ahora era una situación en varias partes del territorio de la Nueva España. Sin embargo, fue convencido por el Generalísimo José María Morelos y los demás miembros del congreso de los diputados, a fin de que la firmase, lo que finalmente logró. La pelea de independencia fue un proceso largo y complicado, y su culminación en 1821 representó grandes cambios para la sociedad mexicana, que abrió paso a una época de desorden de adentro, caracterizada por la tensión entre un proyecto político conservador y otro liberal. La abolición de la esclavitud y del sistema de castas dificultó, paradójicamente, el registro de aquellos afromexicanos anónimos y la visión que se tenía de ellos, lo que contribuyó a su invisibilización a partir de entonces. Y aún más, se prosiguieron documentando casos de esclavitud en todo el siglo XIX, a eso que se sumaron las desigualdades sociales y económicas que perduran hasta la época de hoy. Por tanto, los afromexicanos quedan atrapados dentro del movimiento político emancipador y formaron parte de las huestes de la insurrección desde el primer momento, que tras once años de épica contienda, alcanzaron merecida y espléndida victoria.
Durante una gran parte del intérvalo de tiempo colonial, la situación interna del virreinato de la Novedosa España puede catalogarse como permanente, mucho más nunca fue pacífica. Más allá de que en el centro y sur del país los indígenas se resignaron a la servidumbre tras el derrumbe de sus viejas civilizaciones, en las fronteras del Occidente y del Norte los pueblos se sublevaban a cada paso. Esta vez rastreamos en los anales de la crónica de México para detectar la participación y también predominación de la población afromexicana en la obtención de la independencia nacional, tal como en los rumbos coyunturales o definitivos en los que tomaron parte dentro de la pelea emancipadora. Aunque en 1810 el cura Hidalgo, apoyado por Ignacio López Rayón, habían proclamado la abolición de la esclavitud, esto no se realizó oficial hasta el momento en que el nuevo Estado no se creó y comenzó a sentar las bases legislativas. La abolición de la esclavitud sería oficial en México en 1829, suponiendo un gran paso para poner fin a la lacra esclavista. Sin embargo, para bastantes viejos esclavos la situación no cambió ya que triunfaron su independencia, pero siguieron con faltas económicas y tuvieron una prácticamente nula participación política eficaz, como pasaba con varios pueblos indígenas, como los purépechas.
El Movimiento De Jose Maria Morelos Y Pavón
El virreinato de Novedosa España era esencial desde ambos puntos de vista. Esto ahondó en la crisis donde España se encontraba desde la invasión francesa de 1808 y la posterior restauración absolutista. Desde el punto de vista psicológico suponía el final del enorme Imperio Español, que en otros tiempos había sido el más esencial de todo el mundo. Hubo un intento de restauración de los territorios perdidos, pero fue en balde. El último intento se causó en 1829 y en 1836 España reconocía al final a México como estado sin dependencia en el Tratado definitivo de paz y amistad entre la República Mexicana y S.M.C. la Reina Gobernadora de España.