Explora millones de fotografías, ilustraciones y vídeos de stock de gran calidad. Más información Encuentran una tumba de la dinastía Song en ChinaQuizá la tecnología digital ofrezca una solución. Basándose en el proyecto de fotodigitalización de 23 grutas realizado con el Archivo Internacional Mellon de Dunhuang, la Academia ha emprendido su propia maratón para digitalizar las 492 cuevas decoradas . El ahínco es la contrapartida de la iniciativa en todo el mundo de digitalización de los manuscritos de la cueva 17, hoy desperdigados.
Tuvo que ser otro encuentro con Occidente lo que reveló el secreto de las grutas, e hizo saltar las alarmas patrióticas chinas. Wang se negó a mostrar al extranjero los legajos de la gruta de la Biblioteca, hasta el momento en que supo que Stein también era un enorme admirador de Xuanzang. Una gran parte de los manuscritos resultaron ser traducciones de Xuanzang de los sutras budistas que él mismo había traído de la India.
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A fines del siglo X la Ruta de la Seda ahora se encontraba en decadencia. El naturalismo y la distinción del séquito de Buda caracterizan la escultura de la edad de oro de la dinastía Tang, auge del budismo y del arte de las cuevas de Mogao. Silueta de buda en el fondo de la puesta de sol del templo dorado. Más información Ruta por el RajastánTras varios días ganándose a Wang y varias noches sacando volúmenes de la gruta, Stein partió de Dunhuang con 24 maletas de manuscritos y otras cinco de pinturas y reliquias. Fue entre los expolios mucho más rentables de la crónica de la arqueología, y todo a cambio de una pura donación de 130 libras esterlinas.
La mayoría de los lugares importantes de la Ruta de la Seda cedieron al saqueo y la destrucción, pero las grutas de Mogao perviven. Sus pinturas murales plasman los primeros encuentros entre Oriente y Occidente. Cuadros en Cuadro Buda 160 x 80 cm Modelo Nr. 5502 XXL Las imágenes Estan Listas, enmarcadas en Marcos de Madera auténtica. El diseño de la impresión artística como un Mural Enmarcado.
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Pero más allá de las luchas intestinas, las facciones acordaron que las grutas de Mogao no se tocaban. «Tapiamos las puertas de acceso», cuenta Fan. En el momento en que Xuanzang pasó por Dunhuang, no podía comprender que sus traducciones de los sutras budistas inspirarían a los artistas de Mogao de siglos posteriores. Tampoco podía entender que más de 1.200 años después su obra conduciría al redescubrimiento, al saqueo y, en el siglo XXI, a la protección de las cuevas. Todo lo que el monje podía ver era que, en aquel rincón desértico de la periferia del Imperio, la fe budista se convertía con cada pincelada dada en la obscuridad. Los huecos blancos del mural de la gruta 320 revelan exactamente en qué puntos el historiador de Harvard Langdon Warner levantó partes de las pinturas de forma directa de la pared.
Entonces llegó la Revolución Cultural de 1966 y el régimen de Mao comenzó a liquidar templos budistas, producciones culturales y símbolos foráneos en toda China. Las grutas de Mogao eran un blanco lógico. El equipo de Seguidor no se sustrajo a la convulsión; sus 48 empleados formaron unas 12 facciones revolucionarias que se dedicaban a criticarse e interrogarse entre sí.
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Los andamios invaden esta gruta del siglo X, como una parte de un ambicioso emprendimiento de conservación que procura evitar los efectos de la arena, la sal, el hollín y el aliento de los turistas. Arriba se distingue la cicatriz dejada al arrancar un fragmento. Warner y otros se llevaron muchas piezas de las grutas a principios del siglo XX.
Pero los conservadores de museos extranjeros aducen que sus instituciones han salvado tesoros que quizá se habrían perdido para toda la vida en las guerras y revoluciones de la China del siglo XX. Diviértete con 3 gacetas GRATIS de National Geographic y forma una parte del movimiento por un planeta más sostenible. 2 conservadores británicos del Centro Courthald instruyen a tres investigadores chinos de la Academia de Dunhuang en la cueva 260. Los murales tántricos de la gruta 465 se cuentan entre las últimas, y más eróticas, imágenes creadas en Mogao. Busca en 123RF con imágenes en lugar de texto.
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Mucho más información Médicos del IslamChina, además de esto, dejó de controlar buena parte de la Ruta, y el islam inició su larga migración alén de las cordilleras de Asia Central. ¿Escondían documentos por temor a una invasión musulmana? Lo único seguro es que la cámara (el día de hoy famosa como cueva 17 o gruta de la Biblioteca) fue sellada, enfoscada y disimulada con murales. Mucho más información Ruta de los hermanos GrimmDunhuang se veía llamada de atención periódicamente por convulsiones más mundanas. Pero aun siendo conquistada por dinastías oponentes, aristocracias locales y poderes extranjeros , el desarrollo creativo no se detuvo en Mogao. Quizá fue algo más que una pura veneración de la belleza o del budismo.
En vez de arrasar cualquier vestigio de sus predecesores, cada generación de líderes financiaba grutas novedosas, a cuál mucho más magnífica, y las adornaba con sus efigies piadosas. Las filas de ricos mecenas representados en la base de la mayor parte de los murales fueron incrementando con los siglos hasta llegar a eclipsar las figuras religiosas de las pinturas. Quizá se lleve la palma la emperatriz Wu Zetian, cuyos deseos de proyección (y protección) divina la impulsaron en 695 a supervisar la creación de la escultura mucho más grande del complejo, un buda sedente de 35 metros. Doble exposición de la flor de loto o nenúfar y la cara de la estatua de buda. El budismo es habitual en china, el país nipón y los tailandeses, con lo que muchas culturas de tailandia involucran a buda. Grupo de iconos de celebración del día de vesak.
El origen de las grutas fue una visión de luz. Una tarde del año 366, un monje errabundo llamado Yuezun vio mil budas de oro centelleando en un despeñadero. La visión lo movió a excavar en la roca una pequeña celda de meditación; tras él llegaron otros. Las primeras cuevas no eran más enormes que un ataúd, pero pronto las comunidades monásticas comenzaron a abrir cavidades más extensas, ornadas con imágenes de Buda, para albergar actos de devoción colectivos. De esas cuevas primitivas procede el nombre popular de «Grutas de los Mil Budas».