Consecuentemente, los sacramentos, distribuciones de felicidad divina en el mundo católico, pierden importancia. El diálogo con Dios debe ser directo, lo que significa asimismo una devaluación de los sacramentos así como de las buenas proyectos. Los leales son todos iguales en dignidad y valía, apareciendo de esta manera el término del sacerdocio universal, que lleva a la obligación de leer los textos sagrados para todos los creyentes. ¿Sería posible, entonces, formular la hipótesis de que las tesis de Lutero de 1517 abrieron el camino hacia el capitalismo y la prosperidad de Europa? Temo que tal iniciativa expone muchas inquietudes, al menos por dos causas. La primera, que los orígenes del capitalismo mercantil de la Europa Actualizada son muy anteriores a la reforma protestante y no están en el norte, sino en el sur de Europa.
Ejerció una enorme influencia sobre todas y cada una de las esferas de la vida espiritual de Alemania en los siglos XVI-XVII. La traducción que logró de la Biblia contribuyó altamente a la formación de la lengua nacional alemana. Negaba que la Iglesia y el clero sirvieran de mediadores entre el hombre y Dios.
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Después de siglos en los que la Iglesia condenó la acumulación de riquezas, la reforma religiosa del XVI introdujo el trabajo como una forma de honrar al Señor. Esto es mucho más observable en aquellas manifestaciones religiosas más cercanas al calvinismo, como los puritanos británicos o los protestantes holandeses, aunque asimismo en otras designaciones conectadas de forma directa con el luteranismo. Weber defendió lo opuesto con un argumentario del que prosiguen echando mano los críticos de Marx.
El Dios de los protestantes no era por consiguiente justiciero sino un padre de amabilidad absoluta hacia sus hijos, a los que no ordena a pagar por sus pecados puesto que sabe de sus limitaciones en su aptitud para llegar a él. No premia el afán humano por evitar el pecado ni la contrición, con lo que no va a haber confesión en el mundo luterano. Salvarse depende sólo de la resolución de la divinidad, dando de este modo la vida eterna a todos y cada uno de los que se piensan hijos suyos sin precisar que nadie interceda por ellos.
Sección Monográfica: 500 Años De Lutero
En primer lugar, porque no contamos apunte confiable alguno que indique que las tesis fueran clavadas en la puerta de aquella iglesia. No; semeja que lo que verdaderamente sucedió fue que las proposición fueron enviadas al arzobispo de Maguncia. Y las cosas habrían podido, indudablemente, arreglarse si no se hubiese dado mucha difusión más tarde al artículo y la discusión se hubiese basado en un debate entre teólogos, que era lo que, parece ser, Lutero deseaba. Pero la situación se fue complicando cada vez más; y, tras la excomunión de Lutero y la reafirmación de este en sus principios en la Dieta de Worms, se rompió toda posibilidad de diálogo.
Esto es lo que tiene por nombre justificación por la fe, el segundo pilar del luteranismo. En su popular libro “Sobre los judíos y sus mentiras” defendió abiertamente que habría que aprender fuego no solo a sus sinagogas, sino también a sus escuelas y a sus libros de oraciones y escritos talmúdicos. Pero hizo, además de esto, una propuesta que refleja su forma de entender la actividad económica.
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Si Lutero criticaba el poder del Papa y sus fórmulas para obtener dinero de los fieles para financiar su corte de Roma, ¿no ocurría lo mismo en los principados alemanes, en los que una pequeña clase dirigente vivía a costa del trabajo de los campesinos? Entre 1524 y 1525 una serie de guerras devastaron muchos territorios del viejo Sacro Imperio De roma Germánico hasta el momento en que los príncipes aplastaron terminantemente las revueltas, que -se estima- dejaron más de cien mil muertos. En esta difícil situación Lutero no vaciló en ponerse del lado de los poderosos y llegó a escribir un folleto que se titula expresivamente “Contra las tropas asesinas y ladronas del campesinado” en el que exhortaba a los príncipes a aplastar sin contemplaciones la sublevación. Pero las cosas no acabaron con la derrota de los campesinos, ya que surgieron movimientos en favor de un comunismo primitivo, cuyos principales representantes fueron los anabaptistas; y cuyo líder más relevante fue un antiguo discípulo de Lutero, Thomas Müntzer. Se desarrolló de esta manera una curiosa doctrina, que defendía una sociedad basada, simultáneamente en la ley de Dios -en su peculiar interpretación- y en la propiedad común de los bienes, mujeres dentro en algún caso.
Las ideas de Calvino eran mucho más radicales que las de Lutero respecto a la reforma del cristianismo; pero, además, ofrecían una visión de la sociedad donde se combinaban el rigor religioso y moral con la dedicación al trabajo. Creía Calvino en la predestinación, de acuerdo con la cual es Dios quien elige al hombre para la salvación; pero el éxito personal en la vida es una señal de que su alma va por el buen camino. Por este motivo el trabajo duro -de manera expresa recomendado por su doctrina- se convirtió en uno de los principios básicos de las comunidades calvinistas. Y en otro aspecto sus ideas contribuyeron a sentar las bases de una sociedad capitalista. Desde hace tiempo los teólogos habían discutido sobre la licitud del préstamo con interés. Los críticos de éste, con una visión tradicional de la actividad económica, negaban que el dinero pudiese producir dinero por sí mismo; mientras que otros teólogos aceptaban la presencia de tipos de interés moderados, que consideraban algo afín a la remuneración del trabajo.
Las Cinco \’Tesis\’ De Lutero Que Cambiaron Nuestro Planeta
5.Lutero empieza a polemizar con los dominicos sobre la concesión de indulgencias en el territorio alemán. Antes de poner en circulación de las “95 proposición” (otoño 1517) había atravesado una crisis personal que le había llevado a conclusiones contrarias a la doctrina ortodoxa. Impugnaba el derecho del papá a repartir los frutos de los méritos de Cristo y de los beatos. Para Lutero cada cristiano era un pecador digno en esencia de ser culpado de forma irremediable. En esto consistía uno de los pilares escenciales del luteranismo, el de la justificación por la fe.
Martín Lutero (1483-
La imprenta hizo que las 95 proposición se extendiesen en pocos meses por toda Europa. Pero, sobre todo, sirvió como herramienta para arrimar la Biblia a los fieles. Hasta ese momento, la lectura e interpretación de las Sagradas Escrituras era un monopolio del clero. Desde que los reformadores comenzaron a proteger un diálogo directo entre el hombre y Dios, se transformó en un derecho de todos y cada uno de los fieles.