Esto es que después de llegar a su cenit , y siguiendo la ley de desempeños decrecientes, la producción va a deber disminuir por fuerza, hasta el momento en que el depósito o bien se agote, o quede tan exhausto que obtener un barril más ya no compense. En Euskadi existen tres centros de generación eléctrica mediante el régimen de los restos urbanos en Artigas , San Marcos (Guipúzcoa) y Beasain (Guipúzcoa). Se usan las aguas calientes que brotan a la superficie y otras fuentes de calor. Tienen un impacto ambiental menor o nulo en relación a las energías habituales.
A diferencia de las centrales de agua fluyente y de embalse, la central de bombeo trabaja con dos depósitos de agua, uno inferior y otro superior, ubicados con el mayor desnivel posible. Cuando la oferta de electricidad supera la demanda y los excesos de capacidad están disponibles, el agua se bombea desde el depósito inferior hasta el superior, donde queda depositada en espera de ser utilizada para la generación de corriente en los momentos de carga máxima. Para el accionamiento del generador se emplean turbinas de impulso, generalmente turbinas Pelton. Aquí el agua, a través de una o varias toberas, se arroja a gran velocidad contra los alabes del rodete. A ello hay que agregar, además, dado que la mayoría de los yacimientos de energías fósiles populares están reunidos en zonas geopolíticas inestables, cuyo nivel de conflictividad puede incidir y en verdad así sucedió en ocasiones recientes- en los transportes, esencialmente, marítimos . No es que se acabe el petróleo, ya que solo se extrae el 40 por ciento del disponible; lo que pasa es que cada vez es mucho más complicada y más cara su extracción.
Teniendo en cuenta el volumen teórico de emisiones, las dos fuentes ofrecen resultados muy parecidos. El carbón, gracias a ser la mayor reserva de los tres géneros de comburente fósil, y pues tiene el aspecto de conversión más alto es el que aportaría mayor cantidad de CO2 a la atmósfera, por las mismas razones le proseguirían el petróleo y el gas natural. Las perspectivas de aumento del consumo de combustibles fósiles, es una evidencia incontenible, por el menor coste que piensa para los países en desarrollo, y el modelo de sociedad de consumo en los países desarrollados. Este crecimiento va hacer que el consumo del ámbito de la No OCDE pase al de la OCDE hacia el año 2015, con un repunte en la utilización del carbón como fuente de energía que se situaría en el primer puesto, seguido del Petróleo, Gas Natural, fuentes renovables, y para finalizar, la de origen nuclear. La diferencia porcentual en el consumo de energía según género de fuente de energía principal, es siempre y en todo momento superior en el ámbito de la No OCDE, siendo 1,5 puntos porcentuales superior en la energía derivada del Petróleo; 1,8 en el Gas Natural; 2,1 en el Carbón; 3,2 en la Nuclear, y 1,8 otras energías de carácter renovable, lo que piensa en el consumo total un incremento superior en 2,0 puntos.
El Agua Y La Energía Hidráulica
Por otro lado, la posibilidad ilimitada de generación de energía eléctrica y limpia como sería la procedente de la fusión nuclear, tampoco podría ser opción alternativa al motor de combustión interna, insustituible en el vigente paradigma tecnológico para la conversión de la energía en trabajo productivo en la agricultura, la construcción de infraestructuras y los enormes transportes. El Cuadro 3, muestra las diferencias entre la evolución del consumo de energía, según género de fuente de energía principal, en el campo de la OCDE y No OCDE. La energía nuclear precisa de una inversión esencial, con relación al combustible, y además de esto, debe tomar en consideración la externalización de costos, o sea, el almacenaje definitivo de los restos y el desmantelamiento de la central, al término de la vida de la misma.
Ya se indicó que Alemania cuenta con una dilatada experiencia en el tratamiento y aprovechamiento de la madera de las masas forestales, virtud que en la actualidad no ha perdido respecto al resto de países de la Unión Europea y sigue siendo esencial; pero también se ha indicado que se acumulan las críticas contrarias a la producción indiscriminada de biocombustibles. Esta situación dió sitio a que las directivas institucionales se encaminen hacia un aumento del autoabastecimiento, una reducción del consumo y la diversificación de las fuentes de energía. El plan denominado Estrategia Energética de Euskadi 3E-2005 prevé aumentar el autoabastecimiento eléctrico, apostar por el gas natural, achicar el consumo en un 10%, instalar centrales térmicas de ciclo mezclado y también aumentar la energía eléctrica producida a través de energías renovables.
No obstante, en el final de la década de los setenta , con la denominada crisis del petróleo, el carbón representó mucho más del 25% de la demanda de energía principal mundial. Las energías no renovables eran el carbón, usado eminentemente en la industria y a fines de siglo para generar electricidad, el gas en el iluminado público y asimismo hacia finales del siglo el petróleo que a través de la gasolina se utilizó para el desempeño de los primeros vehículos. Las energías renovables más utilizadas en el siglo XIX eran la madera que se utilizaba para cocinar y calentarse en muchos hogares, el agua y el viento, que movían los molinos. Además de esto, la energía hidráulica así como la conocemos actualmente comenzó a utilizarse para obtener electricidad a finales de ese siglo. Por ello, del mismo modo que se pueden estimar válidas las proyecciones del consumo de Petróleo, Gas Natural y Carbón, sino cambia el vigente sistema económico mundial, asimismo son válidas las proyecciones sobre la emisión de CO2 a la atmósfera.
Energías No Renovables
En el siglo XVIII se descubrieron en Norteamérica los enormes yacimientos de carbón y su consumo empezó a ser incontenible. Se conoce que a pequeña escala lo habían utilizado los indios Hopi, en la actual Arizona. Un siglo después William Murdock iluminaba su casa con gas conseguido de la destilación del carbón. Pero el carbón alcanzó importancia en el momento en que Abraham Darby descubrió en los primeros años del siglo XVIII el desarrollo que permite obtener coque a partir del carbón. Por contra, sí existen referencias muy viejas del uso del carbón vegetal que, como se dijo, se obtiene por calentamiento de la madera en ausencia de oxigeno. Se tienen datos de que a partir del siglo XI el carbón mineral ya se utilizaba en Inglaterra, y en el siglo XIII los ingleses lo explotaban y lo transportaban en barcos a Londres y otros puntos de consumo para generar calor.
Aunque es conocido, merece la pena insistir en el mecanismo que incide sobre el deterioro ambiental. En los procesos que usan materias primas de origen fósil, uno de los subproductos es el dióxido de carbono que provoca el efecto invernadero una de cuyas consecuencias es el calentamiento global de la atmósfera terrestre. Dos zonas primordiales son las responsables de la emisión de CO2 a la atmósfera, Estados Unidos, la Europa de las 27 zonas en las que el avance industrial y económico se encuentra firmemente arraigado, y China, cuyo potencial de desarrollo se considera excepcionalmente alto y cuyas fuentes de energía fósiles se encuentran en buena medida fundamentadas en la utilización del carbón . En la época preindustrial el CO2 en el aire atmosférico era de 280 partes por millón y en el año 2008 fue de 385 partes por millón.
Recursos Renovables
A fines de la década de 1950 y coincidiendo con el Primer Plan de Avance en España, se provocó un cierto interés por parte de algunas autoridades políticas por fomentar estudios que midiesen el potencial y la regularidad de las mareas en el litoral del Sahara español. Véase sobre el aprovechamiento de las mareas en el África oriental Juan Gelpí, 1958 y 1961 y más últimamente, Calvo Martín, 2003 y 2004. El economista y financiero Matthew Simmons asegura, sin embargo, que Arabia Saudita exagera sus reservas y, según reportes profesionales recientes manifiesta que hoy en dia se está encontrando más agua en los pozos. En las centrales de alta presión, el agua procedente de un embalse circula a alta velocidad por el interior de una tubería bajo presión y recala en una central ubicada a un nivel inferior. Debido al gran salto que se genera, se crea una mayor presión en las turbinas, que activan el generador de corriente alterna.
Se ofrecen 2 tipos de fuentes para entablar la relación entre, consumo según tipo de comburente fósil, y emisión de CO2. La incorporación de este capítulo se realiza por la constatación en la revisión estadística de la energía mundial realizada por BP en 2015, que las reservas probadas de combustibles fósiles primordialmente de Petróleo y Gas Natural han incrementado considerablemente, lo que requiere de nuevas consideraciones respecto a la duración final de las reservas probadas, que se pueden ver en el anexo al presente estudio. El resto de energías, denominadas renovables porque (como la hidráulica) se renuevan en la naturaleza y su fuente energética no tiene riesgos para el medio ambiente precisan, para la transformación de la electricidad generada en trabajo, de una gran inversión tecnológica, por ende, de una gran inversión energética para la construcción de la tecnología, que permita transformar la energía en trabajo. Por otro lado, la optimización productiva implica la búsqueda de fuentes de energía asequibles y con perspectivas de larga duración de la fuente que garanticen un avance económico sostenido en el tiempo, y adecuado para la utilización de las máquinas y utensilios capaces de transformar la energía en trabajo productivo.
Lo que está, además de esto, combinado con las previsiones sobre el precio del petróleo que, a corto plazo no dejará de crecer, sobre todo, por el creciente encontronazo de la demanda procedente del ámbito de los transportes. De manera gráfica, se ha sugerido, también, que el ciclo de extracción de petróleo muestra unas pautas que le hacen asimilarse al ciclo escencial de los seres vivos. Cada pozo de petróleo sigue una curva de producción que comienza como es lógico de cero a partir de su exploración, sondeo, perforación y bombeo y va aumentando en aptitud, hasta el momento en que el yacimiento subterráneo al que llegó la perforación se marcha agotando y la presión del petróleo degenera o el agua se marcha filtrando hacia el interior.