Alejandro destacó parte de sus galeras para cerrar la entrada al puerto, mientras él con otro escuadrón atacaba la flota contrincante. Ajeno de señales divinas, se sabe del cierto cuál fue el plan tirio para terminar con el progreso del espigón. Prepararon una nave de carga con brea, madera, paja y antorchas, con la meta de incendiar las torres y defensas de los trabajadores. El barco fue lastrado en su popa a fin de que la proa se incrustase en el terraplén y cambiado con dos mástiles frontales pertrechados con calderos rebosantes de líquido inflamable.
Alejandro Magno se enfrentó a la colosal labor de conquistar la localidad de Tiro, en el presente Líbano. Levantada sobre una isla y protegida por capaces murallas, su conquista precisó la construcción de un colosal espigón desde la costa y el ataque conjunto por tierra y mar por parte de todo el ejército del rey macedonio. Sumer, la primera guerra de la historiaHace 4.500 años, las ciudades sumerias de Lagash y Umma se confrontaron en una guerra que duró mucho más de un siglo, la primera de la que contamos testimonios escritos. Las naves abatieron sus puentes de asedio sobre la brecha y los macedonios entraron en la ciudad. El conjunto de Alejandro fue el primero en dispersar al enemigo, encaramándose a la muralla y barriéndola de defensores. Simultáneamente la flota consiguió irrumpir en los muelles y desembarcar a todavía mucho más macedonios.
El Asedio De Tiro, La Dura Conquista De Alejandro Magno
Merced a ellas tenemos la posibilidad de progresar regularmente tu experiencia de navegación. Para continuar gozando de los servicios de La Central, por favor, lee y admite la política de intimidad. Los cruzados conquistaron Tiro, que actuó como capital del Reino de Jerusalén hasta la caída de este reino en 1291. Tiro volvió a ser parte de los imperios lindantes , y finalmente de Francia y del Líbano sin dependencia en el siglo XX. La lista de reyes de Tiro de Menandro asimismo describió el período desde Ithobaal III hasta Hiram III. Tiro recuperó la independencia con la desaparición de Asiria, si bien Egipto controló Tiro durante parte del tiempo posterior. Los tirios restantes se retiraron de las defensas exteriores y ofrecieron una última resistencia en el centro de la población, siendo todos pasados a cuchillo.
Tras la desaparición de Assarhaddón, Tiro fue asimismo asediada por Assurbanipal en otras ocasiones, y, si bien pudo huír a su directa autoridad, tuvo que tributar, no obstante, un cuantioso impuesto como vasallaje. Nos ha llegado el tratado que a Baal I había impuesto Assarhaddón, firmado en el año 670 a.C., como represalia por su acercamiento político a Egipto. Baal I aparece representado a insignificante tamaño, al lado del faraón Taharqa, en tres estelas de Assarhaddón, localizadas en Zincirli (Turquía), Til Barsip y delta del Nilo ; en ellas, el rey asirio tiene cogidos a los dos mediante un lazo. El progreso se retrasó al llegar a aguas mucho más profundas, punto en el que las catapultas de la ciudad se sumaron al bombardeo incesante que la flota realizaba contra los obreros.
Descripción De El Rey De Tiro Se Creyó Un Dios Y Esto Fue Lo Que Le Pasó
Al mismo tiempo, los macedonios han recibido la asistencia de reyes fenicios y chipriotas, que terminan de desertar junto con sus escuadras de la flota persa. Estos monarcas se aliaron con el conquistador de sus tierras, creando, adjuntado con otras naves de la isla de Rodas, una vigorosa flota de 224 navíos con la que tomar la plaza. Tras conseguir la sumisión de las otras ciudades fenicias, Alejandro estaba convencido de conseguir lo mismo en Tiro sin ninguna dificultad. Así envió mensajeros para pedir que le dejaran la entrada a fin de efectuar sacrificios al dios supremo Melkart, una prerrogativa reservada al rey de la región, en ese instante todavía Darío III. Según las fuentes de la época los tirios se negaron. El historiador antiguo Arriano de Nicomedia asegura que la ciudad prefería mantenerse neutral, pues esa sería “la resolución más sensato con en comparación con asunto de la guerra, el que era todavía indeciso”.
No hay que olvidar que, en esos instantes, el rey persa se encontraba reuniendo un inmenso ejército en Mesopotamia, y que en caso de ser vencedor, sin duda castigaría severamente a quiénes lo hubieran traicionado. Por su lado, el asimismo historiador Diodoro Sículo afirma que “afrontaron alegremente la visión de un asedio”, aguardando ahorrar tiempo para Darío y conseguir de este grandes recompensas. Rey fenicio de Tiro, sucesor de Luli y coetáneo de los reyes asirios Assarhaddón y Assurbanipal. Por los asirios (como represalia contra el insumiso rey sidonio Abdi-Milkot), Baal I recibió las ciudades de Marubbu y de Sarepta, dependientes de Sidón, por no haberse sumado a la rebelión de Abdi-Milkot. Según entendemos por dos prismas, el rey tirio participó adjuntado con otros veintiún monarcas en la construcción del palacio de Nínive, para el que aportó materiales y expertos. Al procurar arrimarse políticamente a Egipto, gobernado entonces por el faraón Taharqa, Assarhaddón tomó represalias contra la ciudad de Tiro en su viaje hacia el delta del Nilo, imponiendo un mayor tributo (671 a.C.).
Impasible ante este duro revés, el rey macedonio siguió con la construcción del espigón, ensanchándolo y reconstruyendo la maquinaria de asedio destruida. Para romper el punto fallecido era necesario proveerse de una flota propia, con la que disputar el control del mar a los tirios. Alejandro se dirigió con su guarda a las ciudades ahora conquistadas de Sidón y Biblos para reunir las naves disponibles y formar una armada propia.
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En lo que coinciden todos los autores viejos es en que Alejandro montó en cólera y, después de eliminar el distrito costero de Tiro, inició los preparativos del asalto. Deseo recibir comunicaciones comerciales sobre productos y/o servicios ofrecidos por la Comunidad RBA. Ver la Política de Privacidad. Menandro-Josefo asimismo contiene una lista de nueve reyes y jueces, con reinados que datan de 591–532 a.
Baal I, Rey De Tiro (680-640 Ac)
La debilidad de la flota de Alejandro y el control persa del mar les infundieron la seguridad suficiente para oponerse a este nuevo conquistador. Las ruinas de la parte continental de Tiro se usaron en la construcción del espigón, acarreadas por la población de las ciudades vecinas y los propios soldados. Arriano detalla de qué forma primero se clavaron leños de madera en el fangodel fondo marino para asegurar la estructura, sobre los que se vertieron piedras y ladrillos recubiertos con arena.
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